Violaciones, constantes
Fuente: La Jornada de Guerrero
LAURA REYES MACIEL
Para la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum), las zonas más álgidas de Guerrero se ubican en las comunidades de La Montaña, Ayutla y los Bienes Comunales de Cacahuatepec donde se pretende construir la hidroeléctrica La Parota, pues son los lugares donde de forma recurrente se violan los derechos humanos de la población y se mantienen en tensión por problemas ejidales y sociales.
El presidente de la Coddehum, Juan Alarcón Hernández, precisó que en el caso de Ayutla continúan los conflictos dirigidos a indígenas, como lo marcó el asesinato de los dos dirigentes de la Organización para el Futuro de los Pueblos Mixtecos (OFPM), Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas; al igual que, recordó, la esterilización de más de 30 mixtecos, en la que tuviero responsabilidad la Secretaría de Salud del estado.
“Ayutla desde hace tiempo en un lugar problemático. Se siguen dando otros problemas, en aquel tiempo la esterilización, hoy (indígenas) privados de la vida, privados de la libertad y perseguidos con órdenes de aprehensión, por eso tenemos que estar atentos”.
Retraso en el diagnóstico
Esas tres zonas conflictivas estarán integradas de una forma especial en el diagnóstico sobre los derechos humanos en Guerrero, en el que colabora el Congreso local, el gobierno del estado y el propio organismo para ser presentado ante las instancias de la Comisión de las Naciones Unidas (ONU) en México.
Fuente: La Jornada de Guerrero
LAURA REYES MACIEL
Para la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum), las zonas más álgidas de Guerrero se ubican en las comunidades de La Montaña, Ayutla y los Bienes Comunales de Cacahuatepec donde se pretende construir la hidroeléctrica La Parota, pues son los lugares donde de forma recurrente se violan los derechos humanos de la población y se mantienen en tensión por problemas ejidales y sociales.
El presidente de la Coddehum, Juan Alarcón Hernández, precisó que en el caso de Ayutla continúan los conflictos dirigidos a indígenas, como lo marcó el asesinato de los dos dirigentes de la Organización para el Futuro de los Pueblos Mixtecos (OFPM), Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas; al igual que, recordó, la esterilización de más de 30 mixtecos, en la que tuviero responsabilidad la Secretaría de Salud del estado.
“Ayutla desde hace tiempo en un lugar problemático. Se siguen dando otros problemas, en aquel tiempo la esterilización, hoy (indígenas) privados de la vida, privados de la libertad y perseguidos con órdenes de aprehensión, por eso tenemos que estar atentos”.
Retraso en el diagnóstico
Esas tres zonas conflictivas estarán integradas de una forma especial en el diagnóstico sobre los derechos humanos en Guerrero, en el que colabora el Congreso local, el gobierno del estado y el propio organismo para ser presentado ante las instancias de la Comisión de las Naciones Unidas (ONU) en México.
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