lunes, 31 de enero de 2011

Por tercera ocasión circula edición apócrifa de La Jornada Guerrero

MARGENA DE LA O

Chilpancingo, 30 de enero. En pleno día de la elección y por tercera ocasión circuló una edición falsa de La Jornada Guerrero en Chilpancingo; está vez le atribuyen las ocho columnas de la portada al ex candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, con un supuesto llamado a no votar por el candidato de la coalición Guerrero nos une, Ángel Aguirre Rivero.

Lo que más destaca es la contraportada del panfleto con fecha de hoy que atribuyen a este medio impreso, pues en todo lo ancho de la página se observa una imagen de un documento manuscrito acerca de un llamado que hace un supuesto grupo delictivo: “Atención a la ciudadanía. El 30 habrá operatibos en todo el estado En represalia a la traición a los compas del cartel independiente No salgan a la calle No queremos niños muertos”.

Como encabezado textualmente se lee: “Muerte ronda la elección”, y a manera de sumario: “A la redacción de la Jornada Guerrero llega narco mensaje y fotos de ejecutados”.

En la portada, además del encabezado “López Obrador llama a no votar por Aguirre”, se agrega que “Aguirre es un hombre sin convicciones. No cumplió su palabra” y “Pido a la gente de Guerrero que no desperdicie su voto”.

Enseguida está una fotografía de López Obrador con el brazo derecho en alto, y con una expresión de arrebato. “Andrés Manuel López Obrador llama a no votar por Angel Aguirre”, es el pie de foto que le atribuyen.

Con ésta es la tercera ocasión que circula una edición falsa en distintos puntos del estado, incluso apenas ayer, se incita a la población a marcar con dos cruces el recuadro del PAN y de la coalición PRD, PT y Convergencia. La primera portada falsa fue distribuida el día 19 de enero.

Hoy el mecanismo de distribución fue el mismo, apareció en la puerta de domicilios de distintas colonias de la ciudad, incluso en el IEEG, cuando los integrantes del Consejo General instalaron la sesión permanente con motivo de la elección a gobernador, se observó a varias personas con la edición falsa.

Fuente: La Jornada de Guerrero

Activistas culpan a Felipe Calderón del incremento de la violencia en México


MAURICIO FERRER

Integrantes de diferentes organismos no gubernamentales llevaron a cabo ayer la tercera manifestación por el cese a la violencia como parte de la campaña ¡No más sangre!.

“Estamos aquí para que el gobierno nos escuche, estamos en solidaridad con las víctimas que han fallecido en la guerra de Calderón”, expresó Marco Solís, activista de la Asociación de Redes y Movimientos Sociales (Aremos).

“¿No sabes cómo dar a conocer tu encabronamiento, decepción, paranoia o apatía ante la pinche situación que vivimos en nuestro país? Te sugerimos que hagas lo siguiente: 1) En un pedazo de papel, cartulina o lo que sea pinta el letrero ¡Basta de Sangre! 2) Ponlo donde puedas: en tu coche, en tu escuela, en las ventanas y puertas de tu casa, en tu centro de trabajo, en los postes, en la iglesia...¡donde puedas y quieras!”, reza el volante que han repartido los miembros de la campaña. Según sus datos –tomados de un diario nacional– unas 34 mil 763 personas han sido asesinadas en el país desde que Felipe Calderón asumió al poder y hasta el 31 de diciembre de 2010".

“Esta guerra la emprendió Calderón puesto que no había necesidad que metiera al pueblo inocente de forma directa, indirecta, esos daños colaterales que se han dado por haber dado el batazo al avispero”, expresó el activista.

Según él, la guerra que el panista Felipe Calderón inició desde que llegó a Los Pinos ha sido usada para tratar de legitimar una presidencia cuestionada luego de los comicios de 2006.

“Quiere usar (Felipe Calderón) la fuerza pública, el Ejército para decir que representa a la sociedad”, añadió.

“Tenemos que hacerle saber a los de la estúpida guerra, que estamos hasta la madre de ellos, que también los muertos tienen familia que les llora, que todos son mexicanos y que ya queremos vivir en paz. ¡Que ya basta de sangre!”, concluye la información impresa repartida ayer tanto en la explanada del mercado San Juan de Dios como afuera de la Biblioteca Iberoamericana, en el centro de Guadalajara.

Fuente: La Jornada de Jalisco

Planean encuentro contra la desaparición forzada


CITLAL GILES SÁNCHEZ ( )

Chilpancingo, 29 enero. Organizaciones sociales dedicadas a la búsqueda de sus familiares y amigos desaparecidos convocaron a un encuentro para exigir que desaparezca el capitalismo y no más personas inocentes.

El Comité de Madres de Desaparecidos Políticos de Chihuahua; la Unión de Madres con Hijos Desaparecidos de Sinaloa; el Comité de Familiares y Amigos de Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados de Guerrero; Familiares de Virginia y Daniela Ortiz Ramírez de Oaxaca, la Comisión para la Defensa de los Bienes Comunales de Ostula; el Comité Contra la Tortura y la Impunidad (CCTI), Familiares del DF y Aguascalientes así como la Red Contra la Represión y por la Solidaridad y el Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco) lamentaron que cada vez son más personas las que desaparecen de manera forzosa y que no están ligadas al crimen organizado.

Por ello, destacaron que ven “con profunda preocupación el incremento de las desapariciones forzadas y la nula solución a nuestras demandas como son la presentación con vida, el esclarecimiento del paradero de los detenidos desaparecidos y el castigo a los culpables”.

Convocaron a un encuentro de familiares, amigos, colectivos y organizaciones para que juntos encuentren alguna estrategia para exigir a las autoridades dar con el paradero de las víctimas.

“El encuentro es para fortalecer las relaciones y los vínculos entre los familiares, colectivos y organizaciones que permitan generar un plan conjunto de actividades y campañas contra la desaparición forzada, la presentación con vida, el esclarecimiento del paradero de los detenidos desaparecidos y el castigo a los culpables”, destacaron.

Informaron que la reunión será el 20 de febrero de este año en la Ciudad de México a partir de las 10 de la mañana en la ciudad de México.

Fuente: La Jornada de Guerrero

AMLO - Naucalpan - Gira de la Lealtad 30 enero 2011








Recibimiento a AMLO y Encinas











Cobertura AMLOTV

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El Tatic Samuel Ruiz, obispo de Chiapas

Domingo, 30 de Enero de 2011 00:00
Escrito por Gilberto Herrera Medina

El gran personaje histórico, Samuel Ruiz, acaba de fallecer, pero su memoria estará viva durante mucho tiempo en la historia y en la realidad indígena de Chiapas, tan entrañable para todos los mexicanos y de gran repercusión mundial en el conocimiento de esa materialidad indígenas agraria, colonial todavía, envuelta y mistificada en su fe religiosa, de la que fue conductor espiritual, se dice, el gran sacerdote católico Samuel Ruiz.

Muy sentida es su muerte, su recuerdo, su memoria, su impacto social y político-religioso en las masas indígenas.

Pocos como él hay en el Continente Latinoamericano, pares como él los hubo en Oaxaca, con el obispo Lona, en Cuernavaca, con el obispo Méndez Arceo, hoy mismo el obispo de Saltillo. Raúl Vera y algunos otros que laboran y van a contracorriente del statu quo social y religioso imperante.

Don Samuel Ruiz García fue denostado en vida por los intereses en turno dentro y fuera de la sociedad civil y lo propio en las esferas políticas. No fue fácil ni cómoda su estadía espiritual al frente de la iglesia en los Altos de Chiapas.

Fue duramente e injustamente cuestionado ante propios y extraños; ¿por qué? Porque los mandones en turno fueron y son improvisados, sin perspectiva social e histórica, como para aceptar y explicarse el por qué de las cosas en Chiapas y de la forma como se dieron los sucesos y se dan en esa latitud nuestra.

Se puede divergir del protagonismo social que toca a las masas indígenas, no es este el momento para meternos en esa historia del capitalismo mundial y del neocolonialismo que le acompaña.

Si Lenin, por ejemplo y las corrientes que dentro del zarismo propugnaban a la comuna rusa, como un tránsito que pudiera saltar las etapas obligadas del horror capitalista; ello no quiere decir que los decembristas y las corrientes del populismo no hubieran dejado impresa su impronta histórica y cultural, como pudiera ser todo lo escrito por el genial León Tolstoi y el propio Nicolás Gogol, con las terribles denuncias en “Las Almas Muertas”, de éste último.

Samuel Ruiz tomó la causa de los indígenas de los Altos de Chiapas, como su propia causa y logró encauzar su defensa social hasta los límites mismos y un poco más allá, de donde se lo permitieron las condiciones convulsas y contradictorias en sí mismas, de las masas indígenas, en lucha con la representación política de los grupos oligárquicos de la tierra y de quienes en ella se disputan la renta de la madera y los fundos petroleros que subyacen en el subsuelo de Riubalto, sobre el subsuelo por donde discurre el enorme Río Usumacinta.

La memoria de este hombre traspasará los tiempos, las ideas, las propias concepciones teológicas y las de quienes lo enfrentaron con otra pretendida ortodoxia. Es lo de siempre.

Samuel Ruiz no es un reformador cualquiera de la Iglesia Católica, todo lo contrario, tan sólo quiso ponerse a tono con el tiempo y en contra de la expoliación despiadada de las masas indígenas, para despojarlos de todo, hasta de su propia fe surgida de esa desesperación social silenciosa por donde discurre la vida social en esa tierra.

Con don Samuel Ruiz veo la figura alerta y solidaria de Carlos Monsivais, de Saramago, de los grupos defensores de los derechos humanos de Europa y Norteamérica, del mundo entero.

Con Samuel Ruiz se oye la poesía de Rosario Castellanos en aquella parte donde escribe: “… Como mi raza bailo enmascarada…” Me hace evocar al mismo Patricio Lumumba, cuando antes de su asesinato dijera: “…llora amado hermano negro, en los milenios de muertes bestiales, tus cenizas las dispersó el Simún y huracán por toda la tierra…”.

Así de memorable y grande es la figura del Obispo Samuel Ruiz, hombre y sacerdote sin beatificación posible y que tan poca falta le hace. Amén.

Fuente: La Jornada de Morelos

Se reúnen miembros del Cecop con párroco; piden ayuda para revitalizar el movimiento


Intenciones de edificar la hidroeléctrica prende focos rojos en la zona, advierten los opositores

HÉCTOR BRISEÑO

Integrantes del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecop), se reunieron con el sacerdote Jesús Mendoza Zaragoza, párroco de la iglesia de San Nicolás de Bari, de la colonia La Laja, para exponerle el temor y la incertidumbre que viven por la jornada electoral que se avecina, pues expusieron que ninguno de los candidatos que busca la gubernatura les brinda la confianza suficiente para evitar que el proyecto hidroeléctrico se lleve a cabo.

Uno de los voceros del Cecop, Marco Antonio Suástegui Muñoz, informó que tras la asamblea realizada el domingo anterior en Parotillas, acordaron acudir al sacerdote Jesús Mendoza para pedir la intervención de la iglesia católica en busca de recomponer el tejido social de las comunidades involucradas y entablar una nueva forma de lucha y resistencia, ante las posturas expuestas por los candidatos.

Suástegui Múñoz manifestó que “hemos cometido errores pero también hemos cometido aciertos”, y expresó que “actualmente nos sentimos en la indefensión, con este proceso electoral se vino a enrarecer el ambiente; se ha aprobado mucho dinero y eso es peligroso para las comunidades”.

Criticó que mientras uno de los candidatos ha amenazado con construir la presa, él otro ha permanecido en la indiferencia, lo que provocó que en el Cecop se hayan prendido los focos rojos.

Aceptó que tras ocho años de lucha, el desgaste físico y mental es considerable, por lo que es necesario revitalizar el movimiento de defensa.

El párroco Jesús Mendoza escuchó las opiniones de los comuneros, quienes reiteraron su posición de defender sus parcelas, incluso iniciar labor de convencimiento entre los que se dicen simpatizantes de la presa, al considerar que han sido engañados y manipulados por las autoridades, las cuales han sacado provecho de la pobreza de la gente.

Mendoza Zaragoza subrayó que los momentos complicados son también de oportunidad.

Pidió a los ejidatarios no trabajar únicamente como opositores, sino los invitó a plantear propuestas de desarrollo regional para sus comunidades.

Entre las soluciones que propuso, planteó reactivar el trabajo pastoral en las parroquias de Las Mesas, Dos Arroyos, Tres Palos y Aguacaliente; efectuar una reunión con el arzobispo Carlos Garfias y retomar los trabajos con la organización Servicios y Asesoría para la Paz (Serapaz).

Sostuvo que la labor de la iglesia es intervenir en el ámbito de su jurisdicción en la construcción de la paz y el respeto a los derechos humanos, nunca en lo político o económico.

Fuente: La Jornada de Guerrero

El trauma infinito de los niños de Gaza

Por: Mohamed Omer / International Middle East Media Center (IMEMC)


Los investigadores averiguaron que una situación prolongada de pobreza, estrés y otros factores medioambientales –incluyendo la guerra y la pobreza que impiden la satisfacción de las necesidades básicas- afecta directamente a la inteligencia de los niños y, por tanto, a sus perspectivas vitales.

Anteriormente se creía que la inteligencia tenía una base genética en un 80%. Sin embargo, estos últimos hallazgos muestran que al menos el 50% de la inteligencia de un individuo está actualmente determinado por factores medioambientales. Más específicamente: cuanto más estrés, menor desarrollo mental. Como uno de los investigadores, Richard Nisbett, psicólogo de la Universidad de Michigan en Ann Arbor, señaló: “Durante la II Guerra Mundial, algunos niños holandeses empezaron tarde el colegio debido a la ocupación nazi, lo que tuvo consecuencias de capital importancia. La media en el test psicométrico de inteligencia en esos niños fue de siete puntos por debajo de los niños que empezaron a ir al colegio con normalidad tras el asedio”.

La persecución nazi y la II guerra Mundial en Europa, que duraron desde 1933 a 1945, afectó a toda una generación de niños. En contraste, la desposesión y ocupación de Palestina por parte de Israel dura ya seis décadas y suma y sigue. Generaciones de niños palestinos se han visto afectados física, psíquica y materialmente. Desde que Ariel Sharon instigó la Intifada de Al-Aqsa a finales del 2000, la represión israelí se ha ido intensificando en Gaza cada vez con mayor rapidez. Según “Gaza Strip: A Humanitarian Implosion”, un informe de 16 páginas de la BBC publicado en marzo de 2008: “En septiembre de 2007, una investigación realizada por la UNRWA en la Franja de Gaza reveló que en los colegios, en las etapas de cuarto a noveno grado, se daba casi un 80% de fracaso escolar, llegando a tasas del 90% en matemáticas. En enero de 2008, UNICEF informó que había colegios en Gaza que estaban cancelando las clases en las que se necesitaba de un alto consumo energético, como informática, laboratorios de ciencias y actividades extracurriculares”.

El informe añadía: “En Gaza ha aumentado enormemente la cifra de personas que viven en la más absoluta pobreza. En la actualidad, el 80% de las familias de Gaza depende de la ayuda humanitaria, comparado con el 63% en 2006. Este aumento expone los niveles de pobreza y la incapacidad, sin precedentes, de la gran mayoría de la población para conseguir los alimentos más básicos”.

La guerra, la pobreza, el estrés causado por la inseguridad económica y personal debido al hecho de vivir bajo ocupación, la constante escasez de elementos imprescindibles como alimentos, agua, tratamiento de aguas residuales, atención médica, la continua amenaza de ataques por parte del ejército israelí, el encarcelamiento forzoso, la falta de libertad de movimiento, la ausencia de derechos, conforman las realidades diarias de los niños de Gaza, realidades que son las únicas que sus padres y abuelos han conocido durante toda su vida. Esa es la pesadilla recurrente que es Gaza.

La vida de un niño

En una primera ojeada, Jalil, de 13 años, parece un adolescente medio. Su joven cuerpo está justo empezando a madurar, es un chico curioso que se distrae con facilidad y un poco travieso. Sin embargo, una inspección más de cerca revela una mirada de vacío en sus ojos poco asociada con su edad. En realidad, si uno viera solamente sus ojos diría que Jalil tiene cerca de 50 años, no 13. Lo que ha desaparecido es ese sentimiento de invencibilidad y exaltado optimismo que son comunes entre los chicos de su edad en cualquier parte del mundo. Donde los niños estadounidenses y europeos hablarían de la última banda de rap, de sus vacaciones escolares o de su reciente enamoramiento, Jalil se limita a encogerse de hombros con apatía.

“Disculpe, pero la guerra ha borrado todos mis bellos recuerdos”, dice con algo de sarcasmo. “La parte delantera de mi casa resultó dañada, por eso me he visto trasladado a una situación vital que nunca pensé iba a experimentar. Tras años de vivir en una casa amplia”, explica, “ahora vivo en la ciudad de Al Zahra”.

La casa de Jalil acabó destruida en enero de 2009 durante el ataque de la “Operación Plomo Fundido” de Israel, convirtiendo en un instante a su familia de clase media en unos sin techo. A diferencia de un desastre natural, no se pudo disponer de fondos provenientes de los seguros ni de asistencia global. La mano del hombre era la que había provocado la situación y Jalil está lejos de estar sólo en ella. Traumatizado, aún recuerda a uno de sus amigos que saltó hecho pedazos cuando un misil israelí impactó en su barrio.

Comprensiblemente, esas son cosas que haría bien en olvidar, pero no puede. Debido al asedio de Israel, apenas se dispone de recursos para poder ayudarle a enfrentar su trauma y seguir adelante con su vida.

Por supuesto que resulta muy duro escuchar las historias de los niños. Pero como cualquier padre sabe, el dolor de sus niños llega duplicado a los responsables de cuidarles. Después de todo, amor es lo único que pueden darles.

La frustración de unos padres

Abu Abdullah, de Rafah, manifiesta el dolor que sienten la mayoría de los padres el Gaza por su incapacidad para proteger a sus niños. Su mujer está muy preocupada porque no puede consolarles. Los niños más pequeños, de 10, 7 y 4 años, mojan su cama por la noche y ella se siente impotente para calmar sus temores. “Es como una especie de cáncer que no puedes controlar ni detener”, dice Umm Abdullah.

Abu Abdullah asiente con la cabeza mientras se sienta en los escalones de entrada a su casa observando cómo sus niños juegan a “árabes e israelíes”, la versión territorios ocupados de “indios y cowboys” o “polis y ladrones”. En el papel de soldado, su hijo mayor, Abdullah, apunta con una pistola china de juguete hacia la cabeza de su hermano. “Voy a matarte ahora mismo”, dice el adolescente.

El juego es muy popular entre los niños que cuentan con pocos recursos para canalizar sus emociones desde la Operación Plomo Fundido. A Abu Abdallah le gustaría más que jugaran al fútbol, pero ese juego refleja la realidad de sus vidas y proporciona a los niños cierto sentido de control.

Incluso cuando está despierto, el hijo de 12 años de Abu Abdallah sufre pesadillas con los bombardeos de los F-16 israelíes en su barriada. En sus sueños, todos los niños salen huyendo de sus casas o escuelas.

Algunos de sus amigos están heridos, otros murieron, y las sirenas de las ambulancias resuenan incesantemente en su cabeza. Pero es más que un sueño: es lo que tuvo que vivir no hace mucho, lo que se reproduce en su mente hasta la saciedad, dándole apenas tregua.

Tampoco los temores de Abdullah son imaginarios. Cuando su madre le envió a comprar lentejas en la tienda cercana de ultramarinos, a sólo tres minutos caminando, el niño volvió a casa sin lentejas y con los pantalones empapados en pis. Al preguntarle por las lentejas, Abdullah empezó a llorar y le dijo a su madre con voz temblorosa y atemorizada que “los aviones teledirigidos están bombardeando”.

Los profesores que trabajan con los estudiantes en barrios de riesgo dentro de ciudades por todo el mundo pueden atestiguar los efectos que la pobreza, la violencia, las armas y el miedo causan en los niños forzados por las circunstancias a vivir en esas situaciones. Gaza entera se ha convertido en una barriada marginal de proporciones inimaginables. Sus niños no sólo tienen que convivir con grupos organizados de la resistencia sino que tienen también que soportar los ataques –normalmente a media noche- del cuarto ejército más poderoso del mundo. Los efectos sobre los niños son predecibles: las peleas y conducta violenta en los colegios y en la calle han aumentado en frecuencia e intensidad, según los psicólogos que visitan los colegios de Gaza.

La psicóloga Zahia Al Qarra, del Programa de Salud Mental de la Comunidad de Gaza (PSMCG) dice que el 79,9% de los niños a los que trata se sienten como en una gran prisión. Otro 79,3% dice que no puede permitirse comprar ni lo que necesita ni lo que desea.

Según un reciente estudio del PSMCG, el 20% de los niños de Gaza sufren trastornos de estrés post-traumático y a otro 13% se le ha diagnosticado depresión. En los colegios de Gaza dirigidos por la UNRWA, donde la alfabetización y los niveles académicos son normalmente altos, 9.000 estudiantes de primaria fracasaron en los exámenes y en su trabajo escolar el pasado curso académico.

Otro psiquiatra del PSMCG confirma que entre los niños de Gaza se han multiplicado los casos de enfermedades, problemas de conducta y traumas psicológicos, citando aumentos en conductas autistas, incontinencia urinaria nocturna, chuparse el dedo, comerse las uñas, reacciones violentas, revivir las escenas bélicas sufridas en las barriadas familiares, miedo a la oscuridad, agorafobia, pánico ante el sonido de los aviones y desinterés por tomar parte en actividades sociales y de grupo, todos ellos síntomas de trastornos de estrés post-traumático y depresión.

“No son sólo los niños”, dice Abu Diaa, padre de siete hijos. “Somos también los adultos quienes necesitamos ayuda psicológica”.

Como la mayor parte de los padres de Gaza, Abu Diaa, cuyo único ingreso es una pensión de minusvalía por una lesión que sufrió en 2003, está continuamente preocupado por encontrar comida y ropa para sus niños.

“Hay dos tipos diferentes de traumas”, explica Abu Diaa, “vivir con el temor a los ataques y vivir con la preocupación de no tener trabajo para poder proteger y alimentar a tu familia.”

Los psiquiatras y los médicos de familia en Gaza observan que a menudo los padres no se dan cuenta de la medida de los traumas de sus niños. Muchos de ellos están tratando de sobrevivir con su propio sufrimiento y estrés y a menudo se olvidan o retrasan sus propios tratamientos. Añádase a esto el estigma que supone buscar tratamiento psicológico para ellos mismos o sus niños. La sociedad árabe y palestina no acepta bien el victimismo y a menudo se equipara la búsqueda de ayuda con admitir que uno es impotente y por tanto una víctima. El director del PSMCG, el Dr. Ahmed Abu Tawahinah, señala que cuando un paciente visita a un médico “nunca dice estoy deprimido o tengo un trastorno de estrés post-traumático”, sino que dirá algo así como “tengo dolor de cabeza”.

Una sociedad bajo estrés

Los efectos psíquicos y psicológicos de la terrible realidad de Gaza impregnan todas las relaciones y situaciones. Según la psicóloga Al Qarra, han aumentado los divorcios, a menudo a causa de la pobreza. Cuando los padres no pueden cuidar de sus niños debido a sus propios traumas, añade, aumentan los números de niños que se ven forzados a abandonar su hogar o a escapar. Y acaban por encontrarse en la calle, rebuscando en los contenedores de basura para hallar algo que vender para conseguir comer o un poco de dinero. Se está también informando de incidentes de abusos sexuales, algo totalmente desconocido con anterioridad en Gaza.

El pasado septiembre, veinte meses después de la guerra de Israel contra Gaza, el Dr. Yamil Al Tahrawi, un profesor universitario de psicología social, decidió analizar los trabajos artísticos de los niños de Gaza para poder comprender y valorar la profundidad de sus traumas psicológicos. Pidió a 455 niños que dibujaran lo que quisieran. Más del 82,3% dibujó imágenes directamente relacionadas con los ataques israelíes contra Gaza. Algunos de esos dibujos reflejan combatientes de la resistencia, soldados israelíes, tanques, excavadoras, ambulancias, helicópteros, aviones de combate F-16 y aviones no tripulados israelíes.

Los niños utilizaron principalmente colores suaves en sus dibujos, evitando los colores fuertes como si tuvieran miedo de ellos. El Dr. Al Tahrawi y otros doctores de Gaza vieron claros indicadores en los dibujos del trauma sufrido tras crímenes de guerra similares a los mencionados en el informe elaborado por el Juez Richard Goldstone para el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas. En efecto, confiesa el Dr. Al Tawahinah, todos los habitantes de Gaza, 1,6 millones de personas, están traumatizados a algún nivel, “incluido yo mismo”.

Como Israel prosigue con sus ataques contra Gaza, la pesadilla sigue intensificándose para Abdullah y todos los residentes de la Franja.

Dos años después de la Operación Plomo Fundido, Abdullah sigue teniendo miedo de irse a dormir, de jugar y de ir caminando al colegio cada día, incluso aunque su padre vaya con él. Uno no puede sino preguntarse por los efectos físicos, emocionales e intelectuales a largo plazo que la continuada ocupación y asedio de Israel tendrá sobre su vida y la de millones de palestinos. Sin embargo, hay una cosa de la que no cabe duda: les está afectando a todos.

Mohamed Omer es un periodista palestino de 22 años nacido en Rafah, licenciado en Filología y Literatura Inglesa por la Universidad Islámica de Gaza. En octubre de 2003, un francotirador israelí mató a su hermano Hussam de 17 años, cuando iba camino al instituto. Nueve días después una excavadora destruyó el hogar de su familia, cuando sus miembros se hallaban en su interior hiriendo de gravedad a su madre. Lleva publicando sus artículos en numerosos periódicos y revistas del mundo entero desde los 17 años. Con su chaleco antibalas y su cámara se encuentra siempre en primera línea del frente.
(Véase:http://annawester.files.wordpress.com/2008/06/mohammed-omer.pdf). Su página en Internet es: www.rafahtoday.org

Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández
Fuente: http://www.imemc.org/article/60486

Tomado de TeleSur

El elefante egipcio inicia su revolución

La pregunta que siempre se ha hecho en los círculos políticos y mediáticos de la nación árabe y del mundo ha sido qué Estado viviría una revuelta tras lo sucedido en Túnez. Egipto, seguido de Jordania y Yemen, encabezaba la lista de Estados candidatos debido al agravamiento de las condiciones de vida en esos países y a las demandas de reforma hechas por sus pueblos.

Las manifestaciones ensordecedoras que se produjeron en quince ciudades de Egipto ayer y en las que participaron decenas de miles de personas, en su mayoría jóvenes, tal vez representen los inicios de una revuelta prevista, cuando no esperada.

Los egipcios han comenzado a inspirarse en el modelo tunecino, algo que queda patente en los lemas coreados por los manifestantes, como «Mubarak, Mubarak, el avión te espera» o «Zain al Abidín, ¿a quién le toca ahora?».

Las condiciones de vida en Egipto son tres veces peor que en Túnez. Mientras la renta per capita anual media en Túnez es de 3.000 dólares, la de Egipto no supera los 800 dólares en el mejor de los casos. Hay más de 60 millones de egipcios que viven por debajo del umbral de la pobreza según criterios de la ONU, es decir, con menos de dos dólares al día.

Tal vez la ausencia de reformas políticas, la represión de los ciudadanos por parte de la seguridad y el aumento de la diferencia entre ricos y pobres sean todos ellos factores que hagan que la explosión sea más insistente en Egipto que en otros países árabes.

El pueblo egipcio se siente humillado y sometido por el régimen gobernante que lo trata con desprecio. Este sentimiento de humillación tuvo su claro reflejo en el boicot casi total de las últimas elecciones legislativas (Parlamento) en las que el Partido Nacional se hizo con la mayoría aplastante de los escaños.

El régimen no aprendió de las lecciones del boicot y la indiferencia popular hacia las elecciones, que intentó contener velando por la transparencia de los comicios, aunque fue todavía más lejos en su desprecio al pueblo con sus primitivas e ingenuas operaciones de fraude de las elecciones que lograron la caída de todos los candidatos de dos grandes partidos en el país, los Hermanos Musulmanes y el Wafd.

El pueblo egipcio, como el tunecino, no sólo quiere pan, sino pan amasado con dignidad, libertades y reformas políticas. No creemos que el régimen esté dispuesto a responder a estas demandas, algo que demuestra su obstinación en tratar estas protestas como trató las anteriores, es decir, con represión.

Ayer hubo 30.000 agentes de seguridad en los principales barrios de El Cairo para reprimir las manifestaciones, es decir, que en algunos casos había más policías que manifestantes. No obstante es difícil decir que lo que valía en el pasado, también valió en las manifestaciones de ayer.

La rueda del cambio ha empezado a girar en Egipto. Es verdad que despacio, pero su efecto tal vez sea mayor y más fuerte. El pueblo egipcio tiene la grandeza del elefante, y el elefante, cuando se levanta, destroza todo lo que se pone por delante sin piedad ni compasión.

El cambio en Egipto supone un cambio en la totalidad de la región, y esto es lo que ha llevado a la señora Hillary Clinton, ministra de Exteriores de EEUU, a pedir a todas las partes que se contengan. Este llamamiento de la señora Clinton llega demasiado tarde, o así lo creemos, pues el colapso en Egipto es muy grande, y los próximos días van a estar llenos de muchas cosas que puede que no gusten a EEUU, a sus aliados israelíes y a los árabes moderados de la región.

Fuente: http://www.elcorresponsal.com/modules.php?name=News&file=article&sid=5817

La fuente: Editorial de Al Quds al Arabi, diario árabe independiente publicado en Londres. La traducción del árabe es de Fanar Traductores.

Washington ante la cólera del pueblo tunecino

Washington ante la cólera del pueblo tunecino

Sundance y el arte de la democracia


Publicado el 27 de enero de 2011

Por Amy Goodman

PARK CITY, Utah. Todos los inviernos, el Festival de Cine de Sundance transforma este pequeño pueblo de alta montaña en un bullicioso centro de la industria cinematográfica. Aunque gran parte de la atención se centra en las personas famosas que asisten, en realidad, Sundance se ha convertido en un lugar de encuentro fundamental, donde el arte, el cine, la política y la disidencia se entrecruzan. Aquí se estrenan muchos de los documentales más impactantes e inspiradores realizados durante el año, películas sobre auténticas luchas de base que dan cuenta de los vaivenes de la historia de la justicia social y los temas más candentes de la actualidad. Películas que enseñan e inspiran a una audiencia cada vez más grande sobre la verdadera naturaleza y el costo de la democracia directa.

"La última montaña," cuyo título en inglés es "The Last Mountain," es un documental que trata sobre la amenaza que acecha actualmente a la montaña Coal River Mountain en Virginia Occidental: la extracción de carbón a cielo abierto, una de las formas de minería más devastadoras del medioambiente que se lleva a cabo hoy en día, podría hacer desaparecer a esta montaña. Los principales culpables son la empresa de carbón Massey Energy y su ex director general, Don Blankenship. Una amplia coalición de activistas de todo el mundo ha intentado activamente detener a Massey. Esta coalición es impulsada por gente común, trabajadores de las poblaciones cercanas y de las aldeas de los Apalaches. Robert F. Kennedy Jr., ambientalista y abogado de larga trayectoria, se unió a ellos en esta lucha y aparece en la película. Le pregunté sobre la lucha que llevan adelante:

"La película trata sobre la subversión de la democracia estadounidense. El año pasado, con el fallo dictado en el caso "Citizens United contra la Comisión Federal Electoral" por el cual se autoriza a las grandes corporaciones a destinar sumas ilimitadas de dinero a la campaña publicitaria de los candidatos, la Corte Suprema anuló un precedente estadounidense que había sido incuestionable durante un siglo y se libró de una ley aprobada en 1907 durante la presidencia de Teddy Roosevelt que protegía al sistema democrático de la gran concentración de riqueza que había generado una cleptocracia corporativa durante la época dorada, tiempos en que los estadounidenses habían entregado su democracia… Por primera vez desde la época dorada, vemos cómo ese tipo de concentración económica regresa a nuestro país."

Kennedy se refirió a la subversión del rol de la prensa, los tribunales, el Congreso y los parlamentos estatales ejercida por el poder corporativo: "Pienso que la erosión de todas estas instituciones de la democracia estadounidense llevó a la gente que se preocupa por el país y por la salud cívica a emprender estas campañas de desobediencia civil y de acción a nivel local."

Este es un mes histórico para Robert Kennedy Jr. Es el cincuenta aniversario de la asunción de su tío John Kennedy como presidente y también de la asunción de su padre, Robert Kennedy, como Fiscal General. Le pregunté por el legado de estos dos políticos, ambos asesinados.

"Para mí, lo más importante que hizo John Kennedy, y que también trataba de hacer mi padre, fue oponerse al complejo militar-industrial. El Presidente Eisenhower, en su discurso final, justo antes de que mi tío tomara las riendas del poder, dijo que el complejo militar-industrial constituía la mayor amenaza contra la democracia estadounidense en la historia de la república. El crecimiento descontrolado del complejo militar-industrial, unido a las grandes corporaciones e influyentes miembros del Congreso, que lenta pero sistemáticamente venían privando a los estadounidenses de sus derechos civiles y constitucionales, derechos que habían hecho de éste un país ejemplar, era la mayor amenaza para el país."

Aquí en Sundance, en lo que fue uno de los momentos más emotivos, Kennedy, recién llegado del funeral de su tío Sargent Shriver (fundador de la organización Cuerpos de Paz), salió al escenario luego de la proyección de "La última montaña" y recibió el abrazo de Harry Belafonte, en torno a cuya figura se desarrolla la película que inauguró el festival de este año "Canta tu canción," una impactante biografía del cantante y activista que es realmente una crónica de los movimientos por la justicia racial y económica del siglo XX.

Belafonte fue uno de los confidentes más cercanos del Dr. Martin Luther King Jr. Hablé con Harry acerca de su trayectoria como activista y de lo que piensa del Presidente Barack Obama. Me dijo: "Durante su campaña para la presidencia, en un acto en el que Obama estaba hablando ante empresarios de Wall Street en Nueva York le dije: 'Bueno... espero que se haga cargo del desafío con más contundencia,' y él me respondió: 'Bueno… usted y Cornel West, ¿cuándo me van a dar un respiro?' A lo que contesté: '¿Qué le hace pensar que no se lo damos?'"

Belafonte era amigo de Eleanor Roosevelt, la esposa del Presidente Franklin Roosvelt. Ella le contó una conversación entre su marido y A. Philip Randolph, uno de los principales organizadores de la "Marcha de Washington por el trabajo y la libertad" en 1963 y, antes de eso, el principal impulsor del sindicato de trabajadores negros del ferrocarril, Brotherhood of Sleeping Car Porters. Randolph le explicó a Roosvelt qué hacía falta para que mejorara la situación de las personas negras y de los trabajadores del país y Roosevelt le dijo que no discrepaba en nada con lo que acababa de decir. Al contarme la historia aquí en Sundance, Harry se recostó en su silla y repitió lo que Roosevelt le dijo a Randolph: "Salgan a la calle y oblíguenme a hacerlo."

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Denis Moynihan colaboró en la producción periodística de esta columna.

© 2010 Amy Goodman

Texto en inglés traducido por Fernanda Gerpe, editado por Gabriela Díaz Cortez y Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org

Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 650 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 250 en español. Es co-autora del libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.