Difusión Cencos México D.F., 10 de mayo de 2010
Boletín de prensa
Organización Internacional del Trabajo
En medio de la creciente preocupación sobre el impacto de la desaceleración económica, la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) advirtió hoy en un nuevo informe que los esfuerzos para eliminar las peores formas de trabajo infantil están perdiendo fuerza, y exhortó a “revitalizar” la campaña mundial para erradicar esta práctica.
La OIT, en su Informe Mundial sobre trabajo infantil que se publica cada cuatro años, dice que el número mundial de niños trabajadores ha disminuido de 222 millones a 215 millones durante el período 2004 – 2008, es decir un 3 por ciento, lo cual representa “una desaceleración en el ritmo de reducción a nivel mundial”. El informe también menciona la preocupación de que la crisis económica mundial pueda “frenar” el avance hacia el objetivo de eliminar las peores formas de trabajo infantil para 2016.
“El progreso ha sido desparejo: no ha sido lo suficientemente rápido ni exhaustivo para alcanzar los objetivos que establecimos”, dijo el Director general de la OIT, Juan Somavia. “Se precisan nuevos esfuerzos y a una mayor escala. La actual situación llama a revitalizar la campaña contra el trabajo infantil. Debemos intensificar la acción y acelerar el ritmo”.
Juan Somavia agregó: “La desaceleración económica no puede convertirse en una excusa para cercenar la ambición y caer en la inactividad. En cambio, nos ofrece la oportunidad para implementar las medidas políticas que las personas, la recuperación económica y el desarrollo sostenible demandan”.
El nuevo informe de la OIT, titulado “Incrementar la lucha contra el trabajo infantil”, fue presentado en víspera de una conferencia mundial sobre trabajo infantil en La Haya, organizada por el gobierno de los Países Bajos en colaboración con la OIT. Somavia dijo que la conferencia, que analizará una “hoja de ruta” para la eliminación del trabajo infantil para 2016, le dará un nuevo ímpetu a la acción mundial.
Tendencias desde 2006
Los resultados del nuevo informe contrastan con la evaluación hecha en 2006, que presentaba un panorama alentador. El informe actual muestra un progreso “desparejo” hacia el objetivo de eliminar las peores formas de trabajo infantil para 2016. El informe advierte que, de persistir las actuales tendencias, la meta de 2016 no será alcanzada.
La buena noticia es que se ha mantenido el patrón general de reducción del trabajo infantil: mientras más peligroso el trabajo y más vulnerables los niños involucrados, más rápido el descenso. Sin embargo, un número alarmante de niños -115 millones- todavía está expuesto a trabajos peligrosos, una variable que con frecuencia se utiliza para referirse a las peores formas de trabajo infantil.
El informe también desglosa los datos por edad y género. El mayor progreso se ha registrado entre los niños y niñas de 5 a 14 años. En este grupo, el número de niños y niñas trabajadores disminuyó en un 10 por ciento. Siguiendo con el mismo rango de edad, el número de niños y niñas en trabajos peligrosos disminuyó en un 31 por ciento. El trabajo infantil entre las niñas disminuyó de manera considerable (en 15 millones, que corresponde a un 15 por ciento). Sin embargo, aumentó entre los niños (de 8 millones, que corresponde a un 7 por ciento). Además, el trabajo infantil entre los jóvenes de 15 a 17 años aumentó en un 20 por ciento, de 52 millones a 62 millones.
El Informe Mundial incluye también datos agregados por región. Muestra, por ejemplo, que Asia y el Pacífico, y América Latina y el Caribe, continúan reduciendo el trabajo infantil, mientras que África Subsahariana ha registrado un aumento tanto en términos relativos como absolutos. Esta región tiene además la más alta incidencia de niños trabajadores, con uno de cada cuatro niños involucrados en trabajo infantil.
Constance Thomas, Directora del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) de la OIT, señaló algunos de los principales desafíos pendientes en la lucha contra el trabajo infantil: la magnitud del problema en África, lograr un avance significativo en el sector agrícola – donde trabaja la mayoría de los niños – y la necesidad de abordar ciertas formas “ocultas” de trabajo infantil, que con frecuencia también califican como las peores formas de trabajo infantil.
“La mayor parte del trabajo infantil tiene origen en la pobreza. Es clara la forma en que debemos combatir este problema. Debemos garantizar que todos los niños tengan la oportunidad de ir a la escuela, se precisan sistemas de protección social que apoyen a las familias vulnerables, en especial en tiempos de crisis, y debemos asegurar que los adultos tengan oportunidades de trabajo decente. Estas medidas, combinadas con la aplicación efectiva de las leyes que protegen a los niños, determinan el camino a seguir”, dijo Constance Thomas.
El programa OIT IPEC fue lanzado en 1992. En el bienio 2008-09, IPEC realizó actividades en más de 90 países.
La Conferencia mundial sobre trabajo infantil que se realizará en La Haya el 10 y 11 de mayo reunirá a cerca de 450 delegados provenientes de 80 países. La reunión servirá también como plataforma para el lanzamiento de un informe realizado por la OIT, el Banco Mundial y UNICEF. El informe, “Unidos en la lucha contra el trabajo infantil. Informe Interagencial para la Conferencia mundial sobre trabajo infantil de La Haya de 2010”, llama a colocar el trabajo infantil entre las prioridades de los programas de desarrollo nacionales. El informe también presenta una serie de pruebas que muestran que el trabajo infantil constituye una traba importante para el desarrollo nacional.
Para más información sobre el Informe Mundial y el informe interagencial, por favor póngase en contacto con el Departamento de Comunicación de la OIT al +4122/799-7912 o escriba a: communication@ilo.org
Para más información sobre la reunión de La Haya, por favor visite: www.childlabourconference2010.com
Fuente: CENCOS
Difusión: Soberanía Popular