Dos caciques lo acusaron de violación
Fuente: La Jornada de Guerrero
MARLEN CASTRO
CHILPANCINGO, 13 DE ABRIL. El indígena nahua Alberto García Castañeda, de Acalco, comunidad de Chilapa, ingresó al penal de esta demarcación en 1998, acusado de violación, aunque en realidad se debió a un problema de tierras que tenía con los hermanos Roberto y Gonzalo Castañeda Bolaños, conocidos caciques de la región.
El Movimiento Agrario Indigenista exigió la liberación inmediata de García Castañeda y de otros 19 presos más, recluidos en los penales de Chilapa, Tixtla y Teloloapan, “todos cayeron por problemas agrarios y ya adentro les fabricaron delitos que no cometieron, situación a la que se prestaron agentes del Ministerio Público y jueces”, denunció el dirigente de la organización, Heladio Santos Martínez.
Acusó de manera particular al agente del Ministerio Público de Chilapa, Saúl Montúfar Mendoza –hermano del director de la Policía Ministerial, Erit Montúfar y del director de la Preventiva de la capital, Bonifacio, de los mismos apellidos.
“Sé que es una acusación seria por la persona de la que se trata, y que me pongo en riesgo, pero tenemos pruebas para demostrar que ese agente se ha prestado a torcer la ley, seguramente a cambio de dinero, afectando a los indígenas”, sostuvo.
Solamente en el penal de Chilapa, donde está recluido García Castañeda, hay otros 15 nahuas más, a los que se les fabricaron delitos, cuando los problemas que tenían eran con caciques de la región por la defensa de sus tierras, agregó Santos Martínez.
García Castañeda ahora tiene 68 años, 10 los ha pasado encerrado en ese penal. A García Castañeda lo aqueja la diabetes, enfermedad que lo ha enflaquecido y menguado su vista, al grado de que está a punto de quedarse ciego.
Los hermanos Castañeda Bolaños querían comprar las tierras de Alberto, quien reiteradamente se negó porque era la única herencia que dejaría a sus seis hijos.
Roberto y Gonzalo insistían en adquirir la propiedad hasta que amenazaron a Alberto García de que algo le pasaría si no accedía.
Los Castañeda lo acusaron de violar a la hermana de éstos, y sin orden de aprehensión fue detenido en Acalco y recluido en el penal de Chilapa.
Santos Martínez acusó que el agente del Ministerio Público se prestó a los intereses de los hermanos Castañeda y por eso Alberto continúa preso y recientemente sentenciado a 20 años de prisión.
El dirigente agrario indicó que los veinte indígenas llevan, en su mayoría, 10, nueve y ocho años presos, y que en 75 por ciento de los casos aún no han sido sentenciados.
Esta mañana, Santos Martínez se paseó por las inmediaciones del Congreso local con una cartulina atravesada en el cuerpo en la que decía que había 20 indígenas presos por problemas agrarios y que exigían su liberación.
Cuando el dirigente quiso ingresar a la sede del Legislativo los vigilantes le impidieron el paso.
Fuente: La Jornada de Guerrero
MARLEN CASTRO
CHILPANCINGO, 13 DE ABRIL. El indígena nahua Alberto García Castañeda, de Acalco, comunidad de Chilapa, ingresó al penal de esta demarcación en 1998, acusado de violación, aunque en realidad se debió a un problema de tierras que tenía con los hermanos Roberto y Gonzalo Castañeda Bolaños, conocidos caciques de la región.
El Movimiento Agrario Indigenista exigió la liberación inmediata de García Castañeda y de otros 19 presos más, recluidos en los penales de Chilapa, Tixtla y Teloloapan, “todos cayeron por problemas agrarios y ya adentro les fabricaron delitos que no cometieron, situación a la que se prestaron agentes del Ministerio Público y jueces”, denunció el dirigente de la organización, Heladio Santos Martínez.
Acusó de manera particular al agente del Ministerio Público de Chilapa, Saúl Montúfar Mendoza –hermano del director de la Policía Ministerial, Erit Montúfar y del director de la Preventiva de la capital, Bonifacio, de los mismos apellidos.
“Sé que es una acusación seria por la persona de la que se trata, y que me pongo en riesgo, pero tenemos pruebas para demostrar que ese agente se ha prestado a torcer la ley, seguramente a cambio de dinero, afectando a los indígenas”, sostuvo.
Solamente en el penal de Chilapa, donde está recluido García Castañeda, hay otros 15 nahuas más, a los que se les fabricaron delitos, cuando los problemas que tenían eran con caciques de la región por la defensa de sus tierras, agregó Santos Martínez.
García Castañeda ahora tiene 68 años, 10 los ha pasado encerrado en ese penal. A García Castañeda lo aqueja la diabetes, enfermedad que lo ha enflaquecido y menguado su vista, al grado de que está a punto de quedarse ciego.
Los hermanos Castañeda Bolaños querían comprar las tierras de Alberto, quien reiteradamente se negó porque era la única herencia que dejaría a sus seis hijos.
Roberto y Gonzalo insistían en adquirir la propiedad hasta que amenazaron a Alberto García de que algo le pasaría si no accedía.
Los Castañeda lo acusaron de violar a la hermana de éstos, y sin orden de aprehensión fue detenido en Acalco y recluido en el penal de Chilapa.
Santos Martínez acusó que el agente del Ministerio Público se prestó a los intereses de los hermanos Castañeda y por eso Alberto continúa preso y recientemente sentenciado a 20 años de prisión.
El dirigente agrario indicó que los veinte indígenas llevan, en su mayoría, 10, nueve y ocho años presos, y que en 75 por ciento de los casos aún no han sido sentenciados.
Esta mañana, Santos Martínez se paseó por las inmediaciones del Congreso local con una cartulina atravesada en el cuerpo en la que decía que había 20 indígenas presos por problemas agrarios y que exigían su liberación.
Cuando el dirigente quiso ingresar a la sede del Legislativo los vigilantes le impidieron el paso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario