Fuente: La Jornada de Guerrero
CITLAL GILES SÁNCHEZ
En el aniversario de la masacre de profesores y padres de familia en Atoyac, hace 42 años, organizaciones guerrilleras denunciaron que a la fecha los gobiernos perredistas y panistas continúan la política de atacar desde el poder a los luchadores sociales y revolucionarios; aseguraron que la lucha del maestro Lucio Cabañas Barrientos se mantendrá vigente mientras haya protestas, huelgas y otras manifestaciones.En un comunicado enviado por el Movimiento Revolucionario Lucio Cabañas Barrientos, Tendencia Democrática Revolucionaria-Ejército del Pueblo, la Organización Insurgente 1º de Mayo, la Brigada de Ajusticiamiento 2 de Diciembre y Unidad Popular Revolucionaria Magonista, recordaron la represión del gobierno de Atoyac y la policía, ocurrida el 18 de mayo de 1967, cuando profesores y padres de familia protestaron contra el autoritarismo de los directivos de la escuela Juan Alvarez y los caciques de la región; en esa ocasión murieron cinco manifestantes, entre ellos una mujer embarazada, además de que 25 campesinos fueron heridos. A partir de esos hechos, dice el comunicado, el profesor Lucio Cabañas, refugiado en el monte y apoyado por campesinos y redes comunitarias, fundó el Partido de los Pobres (PDLP) y la Brigada Campesina de Ajusticiamiento (BCA), con el objetivo de hostigar, desgastar y requisar el armamento del Ejército y la policía, además de cobrar el impuesto revolucionario “a quienes se habían enriquecido a costa del despojo y la explotación”. El levantamiento armado encabezado por Cabañas causó que el gobierno intentara “aniquilar” a los revolucionarios, e invirtió millones de pesos y recursos político-militares en ello, además de aplicar “la política de terror, el asesinato, la desaparición forzada”, para acabar con el foco de insurrección. Como resultado de esas acciones represoras –continúa el documento– en Guerrero hay más de 600 personas detenidas o desaparecidas por el Ejército y la policía. En el comunicado, los grupos insurgentes reivindicaron la lucha de Lucio Cabañas, que se mantiene vigente con las manifestaciones del magisterio, estudiantes, colonos, transportistas, amas de casa, profesionistas, “así como en la resistencia cotidiana contra la explotación capitalista; en sindicatos, en huelgas, en plantones, en bloqueos carreteros”. Destacaron que la lucha del revolucionario está también en los nuevos movimientos armados inspirados en el ideario político.
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