miércoles, 3 de junio de 2009

Abandonan familiares lucha en busca de desaparecidos ante amenazas y apatía

Sufrieron desgaste por desconocer su paradero y los nulos avances en las investigaciones

Fuente: La Jornada de Guerrero


Autoridades insisten en vincular los casos con delincuencia organizada, señala Javier Monroy

MARLEN CASTRO

CHILPANCINGO, 1º DE JUNIO. Desilusionados por la indiferencia de las autoridades y temerosos por las amenazas veladas de que si continúan con la exigencia de la presentación con vida de su ser querido habrá represalias, varias familias de desaparecidos han renunciado a la lucha para dar con el paradero de sus parientes, reconoció el coordinador del Comité de Familiares y Amigos de Desaparecidos, Secuestrados y Asesinados, Javier Monroy Hernández.

Con la tercera jornada por la vida, la libertad, la justicia y los derechos humanos, las organizaciones involucradas con esta la lucha buscan que las familias retomen la lucha por la presentación con vida de sus parientes.

Monroy Hernández indicó que en casi todos los casos, los familiares de los recientes desaparecidos eran personas que no estaban involucradas en la lucha social y no estaban preparadas ni física ni sicológicamente para entrar en un movimiento así, porque además ante la desaparición de un ser querido ninguno lo está.

Luego, se toparon con la indiferencia total de las autoridades en el asunto y esto causó una gran desilusión que se ha conjugado con las amenazas veladas que la mayoría ha recibido para que dejen las cosas como están, según Monroy Hernández.

Precisó que la tercera jornada por la vida tiene como propósito levantar el ánimo de las familias de desaparecidos para que continúen con la lucha, para que otras que no han hecho nada se sumen a las movilizaciones y para procurar acompañamiento a quienes vayan a sufrir estas situaciones, porque desafortunadamente las desapariciones siguen.

Detalló que en los 20 casos de desapariciones denunciadas por el Comité en los dos últimos años nadie ha regresado con sus familiares y se desconocen datos sobre su posible paradero, ni siquiera las razones por las que se los llevaron.

Sin embargo, las autoridades han ligado tales desapariciones con los ajustes de cuentas entre las bandas de narcotraficantes, pero Monroy Hernández insiste en que cuando están relacionadas con el crimen organizado, los cuerpos aparecen ejecutados.

“En los casos que denunciamos es increíble que nadie haya aparecido hasta ahora”, destacó.

Por otro lado, hoy se cumplen los días de plazo que establece la ley para que el Ministerio Público dé una respuesta a la solicitud de coadyuvancia, que hicieron las familias de ocho desaparecidos, sin tener la respuesta oficial de si se acepta o no la petición.

Con las coadyuvancias, el Comité pretende agotar los recursos locales en la exigencia de justicia, para después acudir a las instancias internacionales.

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