jueves, 12 de febrero de 2009

Es normal meter a familiares a trabajar en la UAG, dice el rector

Convoca Contreras Gómez a conferencia para defender su visión patrimonialista


Miembros del STTAISUAG tienen parientes en la nómina y están basificados, justifica

Evade informar cuánto se gasta del presupuesto para pagar a hermanos y cuñados

MARGENA DE LA O

Chilpancingo, 10 de febrero. El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Arturo Contreras Gómez, aceptó que familiares y gente cercana a él trabajan en la máxima casa de estudios desde que asumió el cargo, pero justificó la situación porque que es una práctica normal en cada administración.

En la conferencia de prensa que ofreció en rectoría, acompañado de todos sus funcionarios, trató de desmentir la información que publicó La Jornada Guerrero acerca del número de parientes cercanos y lejanos que trabajan en la Universidad, y afirmó que en su administración sólo entraron tres, entre ellos Anastacio Contreras Gómez, su hermano, y dos sobrinos de los que no dijo nombres, sólo que están en reforestación, carpintería y seguridad social.

Sin embargo, terminó aceptado que hay más parientes en la nómina, con los salarios que heredó de la anterior administración.

–¿Qué hay de su chofer, Javier López Luna, concuño?

–Sí, por aquí está, suman cuatro.

– ¿Y su cuñado?

–Cinco. Aclaro que si no estuvieron trabajando ellos, como quiera otros estuvieran trabajando, aceptó sin empacho.

Comparó su caso con sindicalizados que tienen familiares en la UAG: “hay gente del sindicato que tiene más de dos familiares, y no son rector, son personal de base”. El comentario causó las risas de los asistentes, por la manera desenfadada de aceptar que sus familiares son parte de la nómina.

Dijo además que la entrada de trabajadores se da en los rectorados, “pero la diferencia es que yo los tengo trabajando de confianza, se van; los que estoy anunciando los estoy pagando, pero además están trabajando, no son aviadores”.

Se le insistió que puntualizara la cantidad que gasta la UAG en el salario de sus familiares que entraron durante y antes de su administración, pero evadió el tema.

Acerca del frente que se integró con seis de 14 corrientes de la UAG con el objetivo de enfrentarlo rumbo a las elecciones para renovar la administración, minimizó su integración porque tiene gente cercana que pertenecen a todas esas corrientes, “lo que pasa es que en las vivencias universitarias te agarras de la mano con quien menos pensabas, volteas y era el que no querías”.

También rechazó las razones que expuso el director de Actividades Académicas y asesor editorial, José Luis González Cuevas, luego de conocer que el rector envió –con personal del área jurídica– la notificación de su destitución. Aseguró que sus señalamientos no son ciertos, y que no lo condicionó para que apoyara al director de Planeación, Javier Saldaña Almazán.

Insistió en que los motivos de su salida se sustentan en que no estaba cumpliendo con sus funciones, “lo único que se hizo fue cambiarlo de un lugar a otro, a donde estaba de base; a los mejor la molestia es que antes ganaba 16 mil pesos y ahora 6 mil”. Descartó que otros funcionarios sean despedidos por esas razones.

Antes del cuestionamiento de los reporteros, justificó la conferencia con una explicación detallada de los “logros y avances” de su administración, pero también admitió que tiene pasivos por poco más de 100 millones de pesos, ya que no ha pagado el SAR y FOVISSSTE de 2007 y 2008.

Fuente: La Jornada de Guerrero

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