La acerera se niega a pagar por los daños ambientales que ha provocado la exploración
Fuente: La Jornada de Michoacán
Mañana se realizará una asamblea con representantes de la empresa
GLADIS LEON GONZALEZ
Integrantes de la comunidad indígena de San Miguel Aquila denunciaron la negativa de la empresa acerera Terniun Hylsa de saldar una deuda económica de 20 millones de pesos, como pago del intenso daño ambiental que ha provocado la exploración de yacimientos mineros.
Además, la empresa pretende adquirir mil 500 hectáreas de superficie comunal, a fin de explotar los fundos mineros ubicados en la zona durante 30 años; sin embargo, la empresa desistió de un acuerdo signado con anterioridad, en el que se comprometía, entre otros aspectos, a otorgar regalías a la comunidad por la extracción de hierro.
La comunidad náhuatl busca el establecimiento de un “contrato social”, que contempla cinco ejes torales en la explotación de los recursos: el primero es relativo al respeto a la autonomía y libertad de la comunidad sobre sus territorios, así como un acatamiento irrestricto del reglamento interno de la comunidad.
El segundo punto se refiere a que el convenio entre ambas partes se referirá a la explotación y extracción de hierro del fundo minero; no así de los demás recursos naturales de la zona.
Otro punto versa en la exigencia que los comuneros realizan en torno a la entrega de los estudios y avalúo de los minerales que se encuentran en esa comunidad, ya que hasta el momento Terniun Hylsa se ha negado a hacerlos del conocimiento público.
Explicaron que la comunidad indígena busca que todos los trabajos de explotación y exploración sean ocupados por integrantes capacitados de la misma comunidad, así como todos los servicios y comercios paralelos a la actividad de la mina.
Finalmente, este “contrato social” contempla el pago de ocupación temporal de los territorios indígenas, que representaría una erogación periódica por la extracción del mineral.
Indicaron que en negociaciones anteriores la empresa había aceptado tales consideraciones, sin embargo, actualmente ofrecen el pago único de 10 millones de pesos por la exploración y explotación de mil 500 hectáreas durante un periodo de 30 años.
Informaron que a partir de la construcción de cuatro caminos para la exploración de la zona se dañó de manera importante al medio ambiente, además de que se vulneró el reglamento interno de la comunidad.
Cabe mencionar que desde hace 20 años, esa misma empresa inició la operación de otra mina en la región denominada Telmasple, por lo que de no aceptar las condiciones de la comunidad náhuatl, bloqueará todas las actividades.
Por ello, este domingo se llevará a cabo una asamblea comunal en San Miguel Aquila, donde acudirán representantes de la empresa, por lo que será hasta entonces si se determina llegar a algún acuerdo, o la paralización de las actividades de esta mina.
Fuente: La Jornada de Michoacán
Mañana se realizará una asamblea con representantes de la empresa
GLADIS LEON GONZALEZ
Integrantes de la comunidad indígena de San Miguel Aquila denunciaron la negativa de la empresa acerera Terniun Hylsa de saldar una deuda económica de 20 millones de pesos, como pago del intenso daño ambiental que ha provocado la exploración de yacimientos mineros.
Además, la empresa pretende adquirir mil 500 hectáreas de superficie comunal, a fin de explotar los fundos mineros ubicados en la zona durante 30 años; sin embargo, la empresa desistió de un acuerdo signado con anterioridad, en el que se comprometía, entre otros aspectos, a otorgar regalías a la comunidad por la extracción de hierro.
La comunidad náhuatl busca el establecimiento de un “contrato social”, que contempla cinco ejes torales en la explotación de los recursos: el primero es relativo al respeto a la autonomía y libertad de la comunidad sobre sus territorios, así como un acatamiento irrestricto del reglamento interno de la comunidad.
El segundo punto se refiere a que el convenio entre ambas partes se referirá a la explotación y extracción de hierro del fundo minero; no así de los demás recursos naturales de la zona.
Otro punto versa en la exigencia que los comuneros realizan en torno a la entrega de los estudios y avalúo de los minerales que se encuentran en esa comunidad, ya que hasta el momento Terniun Hylsa se ha negado a hacerlos del conocimiento público.
Explicaron que la comunidad indígena busca que todos los trabajos de explotación y exploración sean ocupados por integrantes capacitados de la misma comunidad, así como todos los servicios y comercios paralelos a la actividad de la mina.
Finalmente, este “contrato social” contempla el pago de ocupación temporal de los territorios indígenas, que representaría una erogación periódica por la extracción del mineral.
Indicaron que en negociaciones anteriores la empresa había aceptado tales consideraciones, sin embargo, actualmente ofrecen el pago único de 10 millones de pesos por la exploración y explotación de mil 500 hectáreas durante un periodo de 30 años.
Informaron que a partir de la construcción de cuatro caminos para la exploración de la zona se dañó de manera importante al medio ambiente, además de que se vulneró el reglamento interno de la comunidad.
Cabe mencionar que desde hace 20 años, esa misma empresa inició la operación de otra mina en la región denominada Telmasple, por lo que de no aceptar las condiciones de la comunidad náhuatl, bloqueará todas las actividades.
Por ello, este domingo se llevará a cabo una asamblea comunal en San Miguel Aquila, donde acudirán representantes de la empresa, por lo que será hasta entonces si se determina llegar a algún acuerdo, o la paralización de las actividades de esta mina.
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