Por TeleSUR.
AMLO, como líder del movimiento en defensa del petróleo, anunció jornadas de resistencia pacífica.
La comisión de Energía de la Cámara de Diputados aprobó el sábado los siete dictámenes de la reforma, apoyada por el Senado el jueves, con lo cual pasarían al pleno de la cámara para su discusión el martes.
El líder mexicano, Andrés Manuel López Obrador, informó el domingo que encabezará protestas contra la inminente aprobación final de una polémica reforma energética que contempla una mayor participación privada en la sensible industria petrolera. El líder del movimiento en defensa del petróleo, anunció jornadas de resistencia pacífica.
La comisión de Energía de la Cámara de Diputados aprobó el sábado los siete dictámenes de la reforma, aprobada por el Senado el jueves, con lo cual pasarían al pleno de la cámara para su discusión el martes.
López Obrador, que acusa al presidente Felipe Calderón de haberle robado las elecciones del 2006 con fraude y de querer privatizar a la petrolera estatal Pemex, pidió a sus simpatizantes que se concentren frente a la cámara ese día para frenar la discusión.
"Además de lo del martes, seguirán las movilizaciones; haremos valer todos los recursos a nuestro alcance", dijo en un mitin ante cientos de simpatizantes.
Incluso anunció que organizará protestas contra compañías petroleras extranjeras que quieran tomar la participación prevista por la reforma en exploración y extracción de crudo.
"Daremos aviso, a cada una de las compañías extranjeras, en el sentido de que no permitiremos que se les entregue en pedazos nuestro territorio, para que sepan a qué atenerse", señaló.
"La ley aprobada decidirá sobre la asignación de bloques para la exploración y producción de hidrocarburos, el tiempo de adjudicación mediante contratos de servicios y las medidas para la asignación de incentivos económicos", informa López Obrador
El petróleo, monopolizado por la empresa estatal Pemex, es la principal fuente de ingresos del país latinoamericano y es visto como un símbolo de soberanía nacional desde su nacionalización en 1938.
El dictamen más áspero de la reforma, incluye las reglas para contratos con incentivos a fin de que empresas privadas realicen trabajos de exploración y extracción de crudo.
En el Senado, la reforma fue aprobada con los votos del gubernamental Partido Acción Nacional (PAN) y del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero también del ala moderada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), de López Obrador.
Fuente: Alternativa Bolivariana.
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