Integrantes de los partidos del Trabajo y Convergencia criticaron ayer las declaraciones del dirigente sustituto del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, contra las movilizaciones convocadas por Andrés Manuel López Obrador en caso de que se pretenda aprobar en el Congreso una reforma energética privatizadora.
Ricardo Cantú Garza, coordinador de los diputados petistas en San Lázaro, señaló que el presidente del sol azteca habla en nombre de su corriente (Nueva Izquierda -NI), no de todo el partido. Refirió que ese tipo de planteamientos en nada ayudan, y consideró que Acosta Naranjo es “demasiado optimista” cuando señala que hay posibilidades de integrar un dictamen único sobre la reforma petrolera.
Quienes ponemos los pies en la tierra sabemos que eso es difícil, debido a los propósitos privatizadores que tienen algunas iniciativas. Ojalá que quienes las apoyan pudieran hacer de lado sus compromisos, pero no soy tan optimista como el perredista, enfatizó.
Asimismo, dijo que a pesar de los señalamientos del dirigente del partido del sol azteca, estima que dicho instituto político participará en las movilizaciones, pues “en lo fundamental, que es impedir la privatización de Pemex, hay coincidencias”.
Por su lado, el diputado José Manuel del Río Virgen, de Convergencia, expuso que si la gente de Nueva Izquierda no atiende el llamado a la movilización, están en su derecho de hacerlo.
Expuso que Acosta Naranjo podrá detener a algunos de sus correligionarios, pero no a todos, e insistió en que “no ayuda a la izquierda tanto desdén por la democracia y tan poca solidaridad con López Obrador, a quien celebraban, vanagloriaban y calificaban como el mejor hombre para gobernar el país”. Por último, manifestó que declaraciones como las de Acosta Naranjo no sirven para construir una oposición inteligente, sino a los intereses de unos cuantos.
LLG
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