Pobladores de este municipio costeño cien por ciento indígena, perteneciente al distrito de Jamiltepec, rechazaron al administrador municipal que el Gobierno Estatal designó para que se hiciera cargo provisionalmente del Ayuntamiento, en tanto se celebren elecciones extraordinarias para nombrar a las nuevas autoridades municipales constitucionales. Los vecinos inconformes argumentaron que no aceptarán como administrador a Cándido Mendoza Santiago, porque es una persona completamente ajena al municipio, además de su "muy identificada militancia" con el Partido Revolucionario institucional (PRI).
Y es que el administrador rechazado en los últimos años como priísta, ocupó el cargo de síndico hacendaria en el pasado Ayuntamiento de Pinotepa Nacional y actualmente suplente del diputado local, José Antonio Iglesias Arreola.
El delegado regional de gobierno en la región, Atenógenes Aguirre Flores, informó que los indígenas mixtecos de manera tajante rechazan al administrador municipal, Cándido Mendoza Santiago y exigen se le dé posesión al presidente municipal electo en una asamblea comunitaria, Cayetano Hilario García Hernández. Hay que destacar que los resultados de la elección por el sistema de usos y costumbres, fueron impugnadas porque Cayetano Hilario García Hernández desde el cargo de presidente del consejo de administración municipal, maniobró la asamblea comunitaria para lograr su reelección como presidente electo. Sin embargo, hoy Santa Catarina Mechoacan se ha convertido en un pueblo sin ley, ya que por un lado se cuenta con un presidente municipal electo reconocido por el pueblo y desconocido por el Gobierno del Estado, y por el otro lado un administrador municipal respaldado por el gobierno y rechazado por el pueblo.
El ex administrador o presidente municipal electo sigue en funciones y mantiene en su poder las instalaciones del palacio municipal; tan es así, que el mismo día martes uno de enero durante el evento donde fue rechazado el administrador municipal, ordenó a sus seguidores golpear a los tatamandones Filiberto Labastida Hernández y Manuel López Gracia, para después ser encarcelados por no respaldar su imposición y reelección.
Los indígenas, quienes hasta el cierre de esta edición continuaban encerrados en la cárcel municipal, fueron golpeados porque cuestionaron la recopilación de firmas en hojas en blanco a favor de Cayetano Hilario García Hernández.
Fuente: AIPIN
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