Fuente: La Jornada de Zacatecas
Francisco Javier Soria
La directora de Campañas de Greenpeace México, Susana Cruickshank, calificó la actitud del gobierno mexicano como escandaloso, debido a la intención evidente de introducir semillas transgénicas al país.
De visita en Zacatecas, la ecologista señaló que la organización que representa se ha manifestado en todo momento para que la administración federal renuncie al pronunciamiento que hiciera en torno al uso de material genéticamente mejorado.
Explicó que aunque no son concluyentes los estudios hechos en el tema de los efectos secundarios derivados de esos granos, México firmó el Protocolo de Cartagena, que establece que ante el desconocimiento de las consecuencias de un producto no se debe hacer uso de éste.
“Eso es lo que demandamos al gobierno mexicano, que respete el convenio firmado y no introduzca en el país una semilla que no sabemos qué resultados desencadenará en el campo nacional”, puntualizó.
Cruickshank aseguró que en México no hay evidencias a favor ni en contra del uso de esos granos, sin embargo, ante la falta de evidencia, lo más correcto es detener tal medida hasta tener la certeza en su uso. Agregó que en Japón el gobierno negó la introducción de arroz transgénico porque ellos son productores naturales de ese alimento y no tienen evidencias en torno a los efectos de la siembra de ese tipo de material.
Expuso que en la Unión Europea algunos experimentos con animales, como las ratas, evidenciaron que el consumo de alimento alterado genéticamente sí provoca daños en la salud de quien lo consume, y subrayó que esos datos deberían ser suficientes para que el gobierno mexicano se detuviera en el uso de los granos.
“Ese tipo de gobiernos, con las medidas que implementaron, demuestran la importancia que le dan a su población; en cambio, en México, con los gobiernos panistas, se evidencia la vinculación que tiene con las grandes trasnacionales”, manifestó.
Entre las empresas que producen las semillas y productos que más dañan la tierra y el ecosistema en general está Monsanto, que sabe del daño que generan los materiales que usa y quiere introducir al país, sin embargo, oculta esa información, señaló la entrevistada.
Finalmente, hizo un llamado a la sociedad en general y al gobierno de México para que atiendan la realidad que vive en la actualidad el país y tomen la decisión adecuada; además, a la sociedad recomendó que no permita que se tomen decisiones que perjudiquen a los mexicanos.
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