El País a la Deriva
Por Enrique Cisneros
No han podido imponer su mentada reforma energética y el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, ya abrió otro frente declarando que además de reforma energética habrá reforma laboral, sacrificando contratos y condiciones laborales.
Por otra parte siguen aumentando los precios de los artículos de primera necesidad y se hacen ajustes al alza de las gasolinas. Pero Felipe Calderón sigue obstinado en seguir su guerrita contra el narcotráfico en la que ha sido acusado de beneficiar a un sector de narcotraficantes para que se impongan a los cárteles rivales.
Bastó que la derecha se manifestara un día, con todo el apoyo de los medios comerciales de comunicación, para que Feli-pillo recibiera a los promotores del mentado Iluminemos México y les ofreciera en materia de seguridad, lo que no ha podido hacer en sus casi dos años de (des)gobierno.
Ante las arbitrariedades y violencias de grupos sindicales charros, Calderón hace mutis y deja que sigan robando y golpeando trabajadores, como es el caso de los seudo dirigentes petroleros.
Se reduce el presupuesto para la educación y se le entrega a la corrupta Elba Esther Gordillo las decisiones en el ramo, declarando la señora que hay que terminar con el normalismo rural e imponer las medidas neoliberales de educación neoliberales de “excelencia y eficientismo”
El campo mexicano está hecho añicos pues la entrada en vigor del TLC, sobre todo para el maíz, azúcar y frijol, sigue arruinando a miles de productores nacionales.
La mentada justicia es un desastre pues se exonera a culpables y se criminaliza la protesta social. El caso más patético es la sentencia de 112 años que le dieron a Nacho del Valle por el delito de defender su tierra.
Más de dos millones de trabajadores del Estado se ampararon contra la nueva Ley del ISSSTE y los jueces convalidaron la imposición que permitió el saqueo de los ahorros de casi 4 millones de trabajadores, declarando ilegales todos los amparos.
En salud la situación es semejante: no hay presupuesto para ese renglón pero si lo hay para aumentar los salarios a los militares. Mientras esto sucede, los ahorros de los jubilados y pensionados a quienes les quitaron sus pensiones para entregarlas a los especuladores mediante la AFORE´s, se deprecian día a día, pero los usureros financieros siguen aumentando sus ganancias elevando las comisiones que cobran por regentear el dinero de los trabajadores.
Decenas de miles de jóvenes fueron rechazados en la educación media y superior y en lugar de resolver el problema el gobierno se obstina en favorecer a los comerciantes de la educación privada.
La corrupción se ha hecho cinismo descarado. Por más que se denuncian robos pro parte de los funcionarios y los empresarios, se forman comisiones que tienen la función de exonerar a los ladrones, como la que está investigando a Vicente Fox o la que exculpó a los Bribiesca o a Camilo Mouriño que es Secretario de Gobernación a pesar de que se ha demostrado que es de nacionalidad española.
Y ya ni hablar de la mentada guerra contra el narco que el gobierno afirma que la va ganando pero que diariamente aparecen decenas de asesinados, encuajuelados, decapitados, en una cantidad que supera las muertes que hay en países en guerra como Irak o Afganistán.
En fin la lista es larga, muy larga y todo apunta a que el gobierno calderonista confía en que será mediante el uso de la represión, sobre todo militar, como controlará las protestas populares. Por ello, con el pretexto de la lucha contra el narcotráfico y lo que llaman la delincuencia organizada, se acuerdan con Estados Unidos medidas para que violando la soberanía, sean mandos norteamericanos los que ordenen en las estructuras militares mexicanas. Para ello se acuerdan medidas como el ASPAN o la llamada Iniciativa Mérida.
No hay vuelta de hoja, este gobierno está a la deriva y confía en la represión y la publicidad como medios fundamentales de control, represión y mediatización.
Ante esto las organizaciones sociales se están juntando y articulando para enfrentar a este gobierno, generándose un peligroso clima de tensión social.
Y tú ¿Ya te estás preparando para lo que viene?
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