Por YVKE Mundial.
Brasil y Argentina suscribieron este lunes un convenio por el que adoptan definitivamente el real brasileño y el peso argentino como sus monedas para los intercambios comerciales bilaterales, eliminando de esta forma el uso del dólar, con el que hasta ahora se calculaban las importaciones y exportaciones entre ambos países.
El Sistema de Pagos en Moneda Local (SML) comenzará a regir el 3 de octubre próximo, anunció el ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega, en la ceremonia de firma del convenio, que fue encabezada por los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Cristina Fernández.
"Dimos un paso inicial hacia una futura integración monetaria regional" y "pronto veremos los primeros resultados en la caída de los costos de exportación e importación", señaló Lula durante el almuerzo que siguió a la firma del convenio.
El documento fue firmado en el palacio de Plananto, la sede de la presidencia brasileña, por los respectivos presidentes de los bancos centrales, el brasileño Henrique Meirelles y el argentino Martín Redrado.
Brasil es el principal destino de las exportaciones argentinas (19 por ciento del total) y a su vez el mayor proveedor de Argentina (32 por ciento de las compras de este país).
Entre enero y junio pasados, ambos países, socios en el Mercosur, se intercambiaron mercancías por valor de 14 mil millones de dólares, con un superávit de unos 2 mil millones en favor de los brasileños.
En ese sentido, Lula recordó que este año el flujo comercial entre Argentina y Brasil será superior a los 30 mil millones de dólares.
Ampliarlo hasta el Mercosur
El ministro Mantega afirmó que ahora los dos países trabajarán para ampliar el acuerdo a sus otros dos socios en el Mercosur, Paraguay y Uruguay, aunque ese proceso exigirá una difícil adaptación técnica previa.
De esa forma, el mayor bloque comercial suramericano podrá avanzar hacia la adopción de una moneda única.
El ministro brasileño adelantó que ambos países están planeando un acto especial el 3 de octubre en Buenos Aires para conmemorar la puesta en operación del nuevo sistema.
"Por el nuevo sistema, importadores y exportadores de Argentina y Brasil podrán pagar y recibir por las transacciones comerciales en sus respectivas monedas", según un comunicado divulgado por el organismo emisor brasileño.
"La profundización del mercado real-peso, la reducción de las trabas en las transacciones comerciales entre los dos países y el acceso de pequeños y medianos exportadores son los principales objetivos de la iniciativa", agrega la nota.
El acuerdo favorecerá principalmente pequeños y medios empresarios que ya no tendrán que hacer contratos cambiarios para vender sus productos al país vecino.
"Con la eliminación de una tercera moneda en las transacciones directas entre las empresas, el exportador, al fijar el precio de la venta en moneda de su país, deja de quedar expuesto a las variaciones en las tasas de cambio y tendrán garantía de que recibirá exactamente el valor negociado en su moneda, lo que confiere más seguridad en el cálculo de sus costos", según el comunicado del Banco Central.
La eliminación del dólar en las negociaciones comerciales era una vieja aspiración de los dos principales países del Mercosur y venía siendo objeto de un cuidadoso proceso de adaptación por parte de los dos países.
Según el convenio suscrito, la tasa del SML será calculada con base en las cotizaciones del peso y del real frente al dólar divulgadas diariamente por los bancos centrales de ambos países.
Los organismos tendrán tres días útiles para realizar la liquidación financiera de la negociación.
Integración al cuadrado
Durante su discurso posterior a la firma del convenio, Lula da Silva invitó a Argentina a participar en las obras para la explotación del petróleo brasileño.
Argentina "debe y puede participar en la construcción de las infraestructuras necesarias" para explotar la enorme riqueza petrolera hallada en el litoral atlántico de Brasil, afirmó.
"En momentos de una dura competencia global por el acceso a la energía, Argentina y Brasil presentan condiciones ideales para desarrollar energías renovables y también para explotar juntos la vasta riqueza de nuestros países en materia de gas y petróleo", dijo Lula.
Por su lado, Fernández defendió la alianza con Brasil, y aseguró que el aumento del flujo de inversiones entre ambos países es una forma de lograr la anhelada integración regional.
"Yo creo que la llegada del capital brasileño para empresas que ya existen; y también nuevas inversiones, son diferentes formas para que la integración llegue", enfatizó.
La mandataria sostuvo que los países de la región deben integrarse con "visión estratégica".
"En un mundo que demanda cada vez más alimentos y más energía", la alianza entre los dos países también "tiene que ver con la defensa estratégica de nuestros recursos naturales", dijo la presidenta.
Otros acuerdos
Los mandatarios también rubricaron un acuerdo entre el estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil y el Banco Nación de Argentina para financiar obras de infraestructura.
Además, en la reunión que sostuvieron, entre otras cosas, se trató la construcción de la represa Garabí, la probable radicación de la fábrica de aviones Embraer en Argentina y la compra, por parte de Aerolíneas Argentinas, de equipos a la empresa brasileña.
La agenda de temas entre los mandatarios incluyó el proyecto de fabricación conjunta del vehículo militar denominado "Gaucho", la construcción de barcazas para ser utilizadas en la hidrovía del Río Paraná, el funcionamiento de la TV digital en Brasil, y acuerdos en materia de emprendimientos nucleares, informaron el sitio web de la presidencia argentina.
Además, se acordó la construcción de nuevos puentes sobre el Río Uruguay, la interconexión ferroviaria, el corredor bioceánico y los convenios de intercambio energético compensado.
Fuente: Alternativa Bolivariana.
Brasil y Argentina suscribieron este lunes un convenio por el que adoptan definitivamente el real brasileño y el peso argentino como sus monedas para los intercambios comerciales bilaterales, eliminando de esta forma el uso del dólar, con el que hasta ahora se calculaban las importaciones y exportaciones entre ambos países.
El Sistema de Pagos en Moneda Local (SML) comenzará a regir el 3 de octubre próximo, anunció el ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega, en la ceremonia de firma del convenio, que fue encabezada por los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Cristina Fernández.
"Dimos un paso inicial hacia una futura integración monetaria regional" y "pronto veremos los primeros resultados en la caída de los costos de exportación e importación", señaló Lula durante el almuerzo que siguió a la firma del convenio.
El documento fue firmado en el palacio de Plananto, la sede de la presidencia brasileña, por los respectivos presidentes de los bancos centrales, el brasileño Henrique Meirelles y el argentino Martín Redrado.
Brasil es el principal destino de las exportaciones argentinas (19 por ciento del total) y a su vez el mayor proveedor de Argentina (32 por ciento de las compras de este país).
Entre enero y junio pasados, ambos países, socios en el Mercosur, se intercambiaron mercancías por valor de 14 mil millones de dólares, con un superávit de unos 2 mil millones en favor de los brasileños.
En ese sentido, Lula recordó que este año el flujo comercial entre Argentina y Brasil será superior a los 30 mil millones de dólares.
Ampliarlo hasta el Mercosur
El ministro Mantega afirmó que ahora los dos países trabajarán para ampliar el acuerdo a sus otros dos socios en el Mercosur, Paraguay y Uruguay, aunque ese proceso exigirá una difícil adaptación técnica previa.
De esa forma, el mayor bloque comercial suramericano podrá avanzar hacia la adopción de una moneda única.
El ministro brasileño adelantó que ambos países están planeando un acto especial el 3 de octubre en Buenos Aires para conmemorar la puesta en operación del nuevo sistema.
"Por el nuevo sistema, importadores y exportadores de Argentina y Brasil podrán pagar y recibir por las transacciones comerciales en sus respectivas monedas", según un comunicado divulgado por el organismo emisor brasileño.
"La profundización del mercado real-peso, la reducción de las trabas en las transacciones comerciales entre los dos países y el acceso de pequeños y medianos exportadores son los principales objetivos de la iniciativa", agrega la nota.
El acuerdo favorecerá principalmente pequeños y medios empresarios que ya no tendrán que hacer contratos cambiarios para vender sus productos al país vecino.
"Con la eliminación de una tercera moneda en las transacciones directas entre las empresas, el exportador, al fijar el precio de la venta en moneda de su país, deja de quedar expuesto a las variaciones en las tasas de cambio y tendrán garantía de que recibirá exactamente el valor negociado en su moneda, lo que confiere más seguridad en el cálculo de sus costos", según el comunicado del Banco Central.
La eliminación del dólar en las negociaciones comerciales era una vieja aspiración de los dos principales países del Mercosur y venía siendo objeto de un cuidadoso proceso de adaptación por parte de los dos países.
Según el convenio suscrito, la tasa del SML será calculada con base en las cotizaciones del peso y del real frente al dólar divulgadas diariamente por los bancos centrales de ambos países.
Los organismos tendrán tres días útiles para realizar la liquidación financiera de la negociación.
Integración al cuadrado
Durante su discurso posterior a la firma del convenio, Lula da Silva invitó a Argentina a participar en las obras para la explotación del petróleo brasileño.
Argentina "debe y puede participar en la construcción de las infraestructuras necesarias" para explotar la enorme riqueza petrolera hallada en el litoral atlántico de Brasil, afirmó.
"En momentos de una dura competencia global por el acceso a la energía, Argentina y Brasil presentan condiciones ideales para desarrollar energías renovables y también para explotar juntos la vasta riqueza de nuestros países en materia de gas y petróleo", dijo Lula.
Por su lado, Fernández defendió la alianza con Brasil, y aseguró que el aumento del flujo de inversiones entre ambos países es una forma de lograr la anhelada integración regional.
"Yo creo que la llegada del capital brasileño para empresas que ya existen; y también nuevas inversiones, son diferentes formas para que la integración llegue", enfatizó.
La mandataria sostuvo que los países de la región deben integrarse con "visión estratégica".
"En un mundo que demanda cada vez más alimentos y más energía", la alianza entre los dos países también "tiene que ver con la defensa estratégica de nuestros recursos naturales", dijo la presidenta.
Otros acuerdos
Los mandatarios también rubricaron un acuerdo entre el estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil y el Banco Nación de Argentina para financiar obras de infraestructura.
Además, en la reunión que sostuvieron, entre otras cosas, se trató la construcción de la represa Garabí, la probable radicación de la fábrica de aviones Embraer en Argentina y la compra, por parte de Aerolíneas Argentinas, de equipos a la empresa brasileña.
La agenda de temas entre los mandatarios incluyó el proyecto de fabricación conjunta del vehículo militar denominado "Gaucho", la construcción de barcazas para ser utilizadas en la hidrovía del Río Paraná, el funcionamiento de la TV digital en Brasil, y acuerdos en materia de emprendimientos nucleares, informaron el sitio web de la presidencia argentina.
Además, se acordó la construcción de nuevos puentes sobre el Río Uruguay, la interconexión ferroviaria, el corredor bioceánico y los convenios de intercambio energético compensado.
Fuente: Alternativa Bolivariana.
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