miércoles, 9 de abril de 2008

EL IGNORADO GENOCIDIO CONGOLEÑO

En la República Democrática del Congo (África) se desarrolla un conflicto que ha producido más de cinco millones y medio de muertos. Al este del país se ubica la región de Kivu donde se encuentran las mayores reservas de minerales africanos: diamantes, oro, cobalto, estaño, manganeso, coltán. Un informe de la ONU de 2002 señala la conexión directa entre la guerra de la región del Kivu y la lucha por los recursos naturales. Los responsables son las autoridades congoleñas corrompidas y sobornadas por los dólares; los países vecinos, Ruanda y Uganda que venden y exportan gratis y sin permiso las riquezas de esta región y las 114 empresas multinacionales que se benefician de este saqueo al no tener que pagar por ellas. Algunas es estas empresas son la norteamericana OM GROUP (líder mundial en producción química basada en el cobalto o níquel) o Cabot Corp que supo tener de director a Samuel Bodman, actual Secretario de Energía en el gobierno de Bush.
Aunque la explotación actual de los minerales es muy superior a 1970 los ingresos aportados al Estado congoleño es una séptima parte de entonces. El destino de los minerales extraídos van camino de Ruanda, donde se borran las huellas con un trasiego de sociedades interpuestas y finalmente acaban en los países occidentales o China.
Él área está ocupada por los llamados “señores de la guerra” (destacándose el ex general Laurent Nkunda acusado de numerosos crímenes de guerra) que se enfrentan al ejército congoleño. Tras el genocidio ruandés el ejército congoleño y milicias locales con apoyo extranjero, luchan unos con otros por el poder y por poseer las riquezas de estas tierras. La mayoría de estos señores de la guerra son apoyados por empresarios occidentales que están bien conectados con Ruanda, tanto económica como militarmente lo que provoca su negativa a entrar en el ejército nacional del Congo. En 1996 toma el poder Laurent Kabila y en 1998 Uganda y Ruanda toman el control sobre el 50% del territorio congolés.
En la actualidad el hijo de Laurent, Joseph, intenta un acuerdo entre el gobierno congoleño y el movimiento rebelde de Nkunda

Fuente: Foro Ciudadano de Participación por la Justicia y los Derechos Humanos.

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