Sábado, 15 de Enero de 2011 00:00
Escrito por Raúl Morales Velázquez
CUERNAVACA. Pobladores de la comunidad indígena de Ocotepec cerraron de nueva cuenta, por más de tres horas, los tres principales accesos a la comunidad, como presión para evitar que funcionarios de la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) y el Tribunal Unitario Agrario (TUA) les quiten áreas comunes para poder privatizarlas.
Los pobladores denunciaron abusos por parte de las autoridades al pretender, junto con otro grupo reducido de comuneros denominados los “viejitos”, robarles más de 60 mil metros de terreno que ocupan actualmente tres canchas de fútbol, un auditorio, dos panteones, el corral de toros y la casa de diálogo, cosa que dijeron “no lo vamos a permitir, porque están terminando con nuestro patrimonio”.
Afirmaron que dicha situación no será tolerada por los más de dos mil comuneros de Ocotepec, por lo que afirmaron que el cierre –de 9 a 12:30 horas– se dio una vez que se supo que autoridades agrarias iban a realizar una visita de supervisión para poder cambiar el uso de suelo, “el pueblo decidió cerrar para que nadie ingresara al poblado de la comunidad indígena”, como lo expresó Víctor Manuel Morales.
Cabe recordar que el pasado 9 de noviembre del año, autoridades agrarias pretendieron realizar una primera supervisión, lo que originó el cierre de los accesos al poblado por más de cuatro horas. Ayer, con el apoyo de unidades de la ayudantía municipal, así como de automóviles particulares y piedras, impidieron la circulación vehicular, lo que derivó en que el actuario de la dependencia federal no pudiera pasar para realizar su trabajo.
Los comuneros, con pancartas en mano y gritando consignas en contra de las autoridades agrarias, acusaron tanto al subdelegado de la SRA, Héctor Soto, a una magistrada del TUA y al presidente de Bienes Comunales, Norberto Ramírez, éste último ya destituido por el pueblo como autoridad.
Recordaron que derivado de censo agrario aplicado en 2005, se intenta desconocer predios que basado al régimen de usos y costumbres, les corresponden a la comunidad, situada al norte de Cuernavaca. Los manifestantes advirtieron que de continuar con esta postura por parte de las autoridades agrarias, iniciarán otro tipo de movilizaciones, incluso adelantaron que podrían acudir a oficinas centrales de la ciudad de México a denunciar a los funcionarios federales agrarios.
Fuente: La Jornada de Morelos
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