miércoles, 15 de julio de 2009

Fabricaron las pruebas contra el me’phaa Hernández, concluye AI

Programan visita de una comisión a Guerrero para el 1º de agosto; exigirán su liberación

Fuente: La Jornada de Guerrero


Las autoridades soslayaron las evidencias que exculpan al indígena detenido, critica

El integrante de la OPIM es el único preso de conciencia en México, asevera la ONG

CITLAL GILES SANCHEZ

Luego de analizar el caso de Raúl Hernández Abundio, integrante de la Organización del Pueblo Indígena Mep’haa (OPIM) preso en Ayutla, Amnistía Internacional (AI) concluyó que las pruebas contra el activista fueron fabricadas, mientras que se desestimaron las que presentaron a su favor.

Para AI, Hernández Abundio es el único preso de conciencia en México y uno de los 11 que hay en todo el mundo.

La organización programó una visita al estado, específicamente a Ayutla, el próximo domingo 2 de agosto, para exigir a las autoridades su liberación, demanda en la que participarán organizaciones locales y estatales.

De acuerdo con información de AI, las defensoras y defensores de derechos humanos siguen enfrentándose a limitaciones en su trabajo, al acoso, intimidación y a abusos, y a pesar de esos obstáculos, destaca, los activistas intervienen para que se produzca un cambio real en la vida de muchas personas en todo el mundo.

“En México, el Estado ha sido incapaz de garantizar el ejercicio de las actividades legítimas de defensores y defensoras sin temor a represalias, y mucho menos reconocer la legitimidad de las actividades que desarrollan”, critica.

En el caso de la OPIM, relata, desde su fundación todos sus integrantes han sido amenazados y hostigados, debido a las constantes denuncias de violaciones a los derechos humanos cometidas por las autoridades civiles y militares en Ayutla, por lo que recientemente la Corte Interamericana de Derechos Humanos ordenó medidas cautelares a 41 miembros de la organización.

Entre las agresiones, detalla el comunicado, está el encarcelamiento de cinco de sus integrantes, acusados del asesinato de un informante del Ejército; casi un año después, cuatro de ellos salieron libres por falta de pruebas. Sin embargo, no se logró la excarcelación de Raúl Hernández, porque hay dos presuntos testigos que lo señalan como el autor material del homicidio.

El caso lo retomó AI, quien tras estudiarlo recientemente, llegó a la conclusión de que las pruebas que se presentaron en su contra fueron fabricadas.

“Después de haber examinado atentamente el caso, Amnistía Internacional ha llegado a la conclusión de que las pruebas contra Raúl Hernández han sido fabricadas, mientras que otras pruebas en su favor han sido desestimadas. Amnistía Internacional considera que Raúl Hernández es inocente y que su detención y enjuiciamiento tienen una motivación política, debido a sus actividades legítimas dentro de OPIM”, aseguró la organización internacional.

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