Familiares de Raúl Lucas Lucía están casi seguros que se trata de él, pero no tienen certeza
Algunas prendas vestir de Manuel Ponce Rosas coinciden, pero otras no, como el pantalón
Los cadáveres hallados en un cerro tenían huellas de tortura y estaban en descomposición
CITLAL GILES SANCHEZ
Este sábado encontraron los cuerpos de dos hombres que fueron localizados en un cerro de Ayutla, los cuales ya estaban en estado de descomposición y con visibles huellas de tortura, mismos que fueron parcialmente identificados como los dirigentes de la Organización para el Futuro de los Pueblos Mixtecos (OFPM), Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas.
Por la tarde una comisión del centro de derechos humanos de La Montaña Tlachinollan, junto con el Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad (CCTI) acompañaron a Carmen Lucas Lucía, hermana de Raúl Lucas, y a Victoriano Ponce Lola, hermano de Manuel Ponce al Servicio Médico Forense (Semefo) de Acapulco para saber si se trata de sus familiares.
Minutos después de las 8 de la noche, Carmen Lucas y el abogado de Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, entraron para hacer el reconocimiento del presidente de la OFPM, Raúl Lucas, y aunque se identificaron algunas prendas de vestir, no se pudo hacer el reconocimiento total por el estado de putrefacción en el que se encontró el cadáver.
En el caso de Raúl Lucas se pudieron identificar los huaraches color vino número 6, un peine, la funda de un celular, el cinturón, la trusa y platino en la coronilla de los dientes.
Mientras Carmen Lucas identificaba las pertenencias de la víctima, la psicóloga de Tlachinollan se comunicaba con Guadalupe Castro, esposa de Raúl Lucas, para preguntarle características específicas del dirigente.
Más tarde, el hermano de Manuel, Victoriano Ponce, acompañado también por Vidulfo Rosales, entró a reconocer el cuerpo, sin embargo, a diferencia de Raúl, sólo pudo identificar una trusa café, una camiseta naranja y un cinturón, ya que el pantalón que traía puesto no coincidía con el que usaba el día que lo secuestraron.
Ante esta situación, la coordinadora del Semefo en Acapulco, María del Socorro Atilano Caballero, comentó que “todo parece indicar que sí son ellos, pero los familiares no están muy seguros”, por lo que no podían entregar los cuerpos hasta que los familiares estén bien seguros de que son los dirigentes.
En breve declaración, Vidulfo Rosales indicó que los cuerpos de las personas fueron parcialmente identificados y “todo parece indicar que sí son ellos, pero vamos a esperar a mañana para que sean las esposas de Raúl y Manuel quienes hagan la identificación oficial”.
Agregó que jurídicamente se debe tener plena certeza para poder sacar los cuerpos de las personas.
Durante la hora y media que la comisión de Tlachinollan y el CCTI permanecieron en el Semefo, siempre estuvo presente el titular del Ministerio Público de la zona Centro, David García Muñoz.
Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas se dedicaban a la defensa de los derechos de los indígenas na savi y fueron secuestrados el viernes 13 de este mes, en la inauguración de unas oficinas de la SEG en Ayutla.
Raúl Lucas y Manuel Ponce han defendido a los pueblos indígenas desde hace años, apoyando al menos a 32 comunidades na savi ubicadas en Costa Chica, documentando y denunciando pública y legalmente los atropellos de militares en los pueblos.
Tres días después de su desaparición Amnistía Internacional emitió una acción urgente, en el que exigió al gobierno mexicano hacer la presentación con vida de los dirigentes y externó su preocupación por los dirigentes, ya que hasta esa fecha (17 de febrero) nadie sabía del paradero de ambos, y según sus familiares, no estaban en ninguna cárcel u hospital de Ayutla.
A raíz del llamamiento diversas organizaciones internacionales, nacionales y estatales exigieron la presentación con vida de los indígenas; incluso, el jueves pasado acudió una delegación de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, quienes platicaron con las esposas de los desaparecidos.
De acuerdo con información del CCTI, Raúl Lucas fue detenido temporalmente e interrogado por el Ejército en Ayutla el 18 de octubre de 2006. El 15 de febrero de 2007 fue objeto de una emboscada cerca de Ayutla, en la que unos hombres no identificados estuvieron a punto de matarlo: lo abandonaron con un disparo en el cuello, creyendo que estaba muerto.
Fuente: La Jornada de Guerrero
Algunas prendas vestir de Manuel Ponce Rosas coinciden, pero otras no, como el pantalón
Los cadáveres hallados en un cerro tenían huellas de tortura y estaban en descomposición
CITLAL GILES SANCHEZ
Este sábado encontraron los cuerpos de dos hombres que fueron localizados en un cerro de Ayutla, los cuales ya estaban en estado de descomposición y con visibles huellas de tortura, mismos que fueron parcialmente identificados como los dirigentes de la Organización para el Futuro de los Pueblos Mixtecos (OFPM), Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas.
Por la tarde una comisión del centro de derechos humanos de La Montaña Tlachinollan, junto con el Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad (CCTI) acompañaron a Carmen Lucas Lucía, hermana de Raúl Lucas, y a Victoriano Ponce Lola, hermano de Manuel Ponce al Servicio Médico Forense (Semefo) de Acapulco para saber si se trata de sus familiares.
Minutos después de las 8 de la noche, Carmen Lucas y el abogado de Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, entraron para hacer el reconocimiento del presidente de la OFPM, Raúl Lucas, y aunque se identificaron algunas prendas de vestir, no se pudo hacer el reconocimiento total por el estado de putrefacción en el que se encontró el cadáver.
En el caso de Raúl Lucas se pudieron identificar los huaraches color vino número 6, un peine, la funda de un celular, el cinturón, la trusa y platino en la coronilla de los dientes.
Mientras Carmen Lucas identificaba las pertenencias de la víctima, la psicóloga de Tlachinollan se comunicaba con Guadalupe Castro, esposa de Raúl Lucas, para preguntarle características específicas del dirigente.
Más tarde, el hermano de Manuel, Victoriano Ponce, acompañado también por Vidulfo Rosales, entró a reconocer el cuerpo, sin embargo, a diferencia de Raúl, sólo pudo identificar una trusa café, una camiseta naranja y un cinturón, ya que el pantalón que traía puesto no coincidía con el que usaba el día que lo secuestraron.
Ante esta situación, la coordinadora del Semefo en Acapulco, María del Socorro Atilano Caballero, comentó que “todo parece indicar que sí son ellos, pero los familiares no están muy seguros”, por lo que no podían entregar los cuerpos hasta que los familiares estén bien seguros de que son los dirigentes.
En breve declaración, Vidulfo Rosales indicó que los cuerpos de las personas fueron parcialmente identificados y “todo parece indicar que sí son ellos, pero vamos a esperar a mañana para que sean las esposas de Raúl y Manuel quienes hagan la identificación oficial”.
Agregó que jurídicamente se debe tener plena certeza para poder sacar los cuerpos de las personas.
Durante la hora y media que la comisión de Tlachinollan y el CCTI permanecieron en el Semefo, siempre estuvo presente el titular del Ministerio Público de la zona Centro, David García Muñoz.
Raúl Lucas Lucía y Manuel Ponce Rosas se dedicaban a la defensa de los derechos de los indígenas na savi y fueron secuestrados el viernes 13 de este mes, en la inauguración de unas oficinas de la SEG en Ayutla.
Raúl Lucas y Manuel Ponce han defendido a los pueblos indígenas desde hace años, apoyando al menos a 32 comunidades na savi ubicadas en Costa Chica, documentando y denunciando pública y legalmente los atropellos de militares en los pueblos.
Tres días después de su desaparición Amnistía Internacional emitió una acción urgente, en el que exigió al gobierno mexicano hacer la presentación con vida de los dirigentes y externó su preocupación por los dirigentes, ya que hasta esa fecha (17 de febrero) nadie sabía del paradero de ambos, y según sus familiares, no estaban en ninguna cárcel u hospital de Ayutla.
A raíz del llamamiento diversas organizaciones internacionales, nacionales y estatales exigieron la presentación con vida de los indígenas; incluso, el jueves pasado acudió una delegación de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, quienes platicaron con las esposas de los desaparecidos.
De acuerdo con información del CCTI, Raúl Lucas fue detenido temporalmente e interrogado por el Ejército en Ayutla el 18 de octubre de 2006. El 15 de febrero de 2007 fue objeto de una emboscada cerca de Ayutla, en la que unos hombres no identificados estuvieron a punto de matarlo: lo abandonaron con un disparo en el cuello, creyendo que estaba muerto.
Fuente: La Jornada de Guerrero
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