domingo, 30 de noviembre de 2008

Testimonios de la Represión a Normalistas de Michoacán



27 de noviembre de 2008

“Al correr nos cayó una bomba lo que nos obligó a no seguir corriendo. Nos subimos a un camión y el chofer nos dijo “no se preocupen”, cuando se acercaron los policías el chofer no les abrió, sin embargo un policía rompió el vidrio, se brincó y empezó a golpear al chofer y luego se puso a abrir la puerta a patadas. Inmediatamente se subieron todos los demás policías y nos bajaron a todos los hombres a putazos, nos golpearon en las piernas y las costillas, con algo que no puedo identificar. Nos tiraron al suelo y nos decían groserías, nos amenazaban… luego sólo escuche la voz de una mujer que ordenaba que bajaran a todas las mujeres, a ellas se las llevaron detenidas. El contingente de la marcha avanzó hacia nosotros y los policías comenzaron a correr; nosotros nos levantamos ayudados por los compañeros con los que marchábamos.”

Estudiante de la ENAH



“Llegamos al punto del bloqueo policíaco, queríamos pasar para unirnos a la marcha de Morelia. Nuestra intención era poder pasar con todo y camiones. Nos atacó la policía con piedras. Corrímos hacia atrás, ellos aventaron gas, a los primeros camiones les cayó piedras y gas. Del otro lado de la acera había gente de la policía vestida de civil. Nos atacaron y golpearon, a muchas compañeras las detuvieron. Un helicóptero volaba muy bajo y desde allí gaseaban a los “compas” de adelante. Al regresar por ellos, el helicóptero aventó granadas que cayeron entre los carros parados por el tráfico, una cayo dentro de un taxi que llevaba pasaje. Después un policía sacó un arma de su bota y apuntó hacia el contingente e hirió a un compa en la mano”.

Estudiante del CCH Sur de la UNAM



“Iba caminando por la zanja de la carretera cuidándome de los gases que aventaban desde el helicóptero, después nos refugiamos debajo y a un lado de un trailer que estaba parado. Se sentía el aire del helicóptero que sobrevolaba bastante bajo, enseguida se oían palabras de compañeros que decían que un policía estaba apuntando con una pistola hacia donde nos encontrábamos. El helicóptero seguía sobrevolando el lugar y se dirigió hacía la zanja en donde me encontraba; claramente vi que decendió bastante y un policía que iba colgado del lado derecho (frente a mi) tomó una posición de disparo apuntando hacía donde estábamos nosotros y a otros compañeros que venían más atrás, lo que provocó que se agacharan y que buscaran refugio. Tiempo después vi a un compañero herido en la mano, casi colgándole y todos a su alrededor decían que había recibido un disparo”.

Estudiante de Tiripetio Michoacán

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