Por TeleSUR.
El Presidente paraguayo aboga por una constituyente que haga modificaciones importantes en la Carta Magna y marquen un punto de cambio radical en la orientación jurídica que beneficie a todo el pueblo de la nación sudamericana.
El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, manifestó su intención de impulsar una constituyente que haga modificaciones importantes en la Carta Magna y marquen un punto de cambio radical en la orientación jurídica que beneficie a todo el pueblo de la nación sudamericana.
En entrevista exclusiva para TeleSUR, el mandatario indicó que para llegar a ese objetivo se necesitan "políticas de diferenciación" que aclaren su intención de no hacer una Constituyente que pueda garantizar y facilitar su gobierno, sino que tenga como propósito hacer ganar a todo el país.
"Yo creo que acá se tiene que hacer una diferenciación. Fernando Lugo no quiere una constituyente que pueda garantizar y facilitar el gobierno de Fernando Lugo, aquí el país tiene que ganar y la correlación de fuerzas es un tema que se tiene que discutir en los diferentes estamentos de la sociedad, especialmente los partidos políticos para ver qué tipo de Constitución se requiere", explicó el jefe de Estado.
Tales declaraciones las dio en el marco de la celebración de sus primeros 100 días de gestión al frente de Paraguay, en las que destacó que la actual Carta Magna "tiene elementos muy valiosos", pero señaló "que no se han utilizado todavía para dar resultados eficientemente desde las instituciones de su país".
"La Constitución debe marcar un punto de cambio radical en la orientación jurídica del país y creo que eso puede ayudar a que muchas instituciones puedan tener una funcionalidad. Aparte, la Constitución que tenemos responde a una conyuntura del año 92 , donde realmente lo social, económico y político era totalmente diferente" a lo que vive la nación en este momento.
"Yo creo que hoy, la gran mayoría, la estadística lo dice, están reclamando, ansiando, pidiendo la Constituyente que pueda facilitar los cambios estructurales que el país necesita", sugirió el presidente.
En relación a los errores y falencias que Lugo reconoce en su informe de gestión, asegura que los ha asumido para mejorar esta nueva etapa en su administración, a la vez que señaló que no cree en los cambios rápidos porque no son duraderos en el tiempo.
"Una de las falencias es que tuvimos la responsabilidad de mirar la casa por dentro y no hemos tenido los resultados hacia afuera. La ciudadanía exigió cambios rápidos, yo creo que primero tiene que entender que los resultados más eficientes, más eficaces, son aquellos que se realizan desde un proceso y tienen maduración de largo alcance (...) queremos que el cambio también sea duradero en el tiempo", dijo Lugo.
Considera que el pueblo paraguayo tiene conciencia del cambio producido en el Poder Ejecutivo, pero reclama cambios sustanciales que sean vigentes en el tiempo.
Asimismo reconoció que el Parlamento todavía debate leyes que deberían ya estar sancionadas.
"Creo que la salida sería poder coordinar las acciones de manera más eficiente y eso lo intentaremos hacer en las próximas semanas y en los próximos meses, para que esta ciudadanía, que se merece una vida más digna, puedan obtener los resultados que desea", agregó.
Sobre la Reforma Agraria, el jefe de Estado de Paraguay, indicó que las múltiples movilizaciones de organizaciones sociales realizadas en el país suramericano, cobran sentido partiendo del hecho que la Reforma va más allá de una simple repartición de tierras.
"Definitivamente la reforma agraria no la consideramos simplemente como una repartija de tierras, tal como se ha hecho históricamente en el país. Por eso hay unas 20 organizaciones estatales hoy en coordinación, la cuestión técnica, la cuestión crediticia, de acompañamiento, de salud, de educación, de infraestructura, la que tiene que ir acompañando todo el proceso para que la producción agrícola pueda tener resultados positivos especialmente cerrándose el círculo de la comercialización y que esto le pueda permitir una vida mucho más digna al hombre del campo".
Más temprano, el obispo paraguayo, Mario Melanio Medina, conocido defensor de los Derechos Humanos, exhortó al presidente Lugo a "dejar de anotar para empezar a actuar", al respecto el mandatario respondió que "tenemos que gestionar conjuntamente, el Ejecutivo está actuando, pero los otros estamentos de la sociedad tienen que ir acompañando eficazmente todo el proceso".
"Tenemos que seguir anotando los hechos, los acontecimientos y sobre todo los grandes desafíos y marcar el rumbo como lo estamos marcando ahora, un rumbo hacia una democracia por más calidad, donde las instituciones sean más eficientes, en donde las personas también puedan apoyar por un proyecto común", puntualizó.
Fuente: Alternativa Bolivariana.
El Presidente paraguayo aboga por una constituyente que haga modificaciones importantes en la Carta Magna y marquen un punto de cambio radical en la orientación jurídica que beneficie a todo el pueblo de la nación sudamericana.
El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, manifestó su intención de impulsar una constituyente que haga modificaciones importantes en la Carta Magna y marquen un punto de cambio radical en la orientación jurídica que beneficie a todo el pueblo de la nación sudamericana.
En entrevista exclusiva para TeleSUR, el mandatario indicó que para llegar a ese objetivo se necesitan "políticas de diferenciación" que aclaren su intención de no hacer una Constituyente que pueda garantizar y facilitar su gobierno, sino que tenga como propósito hacer ganar a todo el país.
"Yo creo que acá se tiene que hacer una diferenciación. Fernando Lugo no quiere una constituyente que pueda garantizar y facilitar el gobierno de Fernando Lugo, aquí el país tiene que ganar y la correlación de fuerzas es un tema que se tiene que discutir en los diferentes estamentos de la sociedad, especialmente los partidos políticos para ver qué tipo de Constitución se requiere", explicó el jefe de Estado.
Tales declaraciones las dio en el marco de la celebración de sus primeros 100 días de gestión al frente de Paraguay, en las que destacó que la actual Carta Magna "tiene elementos muy valiosos", pero señaló "que no se han utilizado todavía para dar resultados eficientemente desde las instituciones de su país".
"La Constitución debe marcar un punto de cambio radical en la orientación jurídica del país y creo que eso puede ayudar a que muchas instituciones puedan tener una funcionalidad. Aparte, la Constitución que tenemos responde a una conyuntura del año 92 , donde realmente lo social, económico y político era totalmente diferente" a lo que vive la nación en este momento.
"Yo creo que hoy, la gran mayoría, la estadística lo dice, están reclamando, ansiando, pidiendo la Constituyente que pueda facilitar los cambios estructurales que el país necesita", sugirió el presidente.
En relación a los errores y falencias que Lugo reconoce en su informe de gestión, asegura que los ha asumido para mejorar esta nueva etapa en su administración, a la vez que señaló que no cree en los cambios rápidos porque no son duraderos en el tiempo.
"Una de las falencias es que tuvimos la responsabilidad de mirar la casa por dentro y no hemos tenido los resultados hacia afuera. La ciudadanía exigió cambios rápidos, yo creo que primero tiene que entender que los resultados más eficientes, más eficaces, son aquellos que se realizan desde un proceso y tienen maduración de largo alcance (...) queremos que el cambio también sea duradero en el tiempo", dijo Lugo.
Considera que el pueblo paraguayo tiene conciencia del cambio producido en el Poder Ejecutivo, pero reclama cambios sustanciales que sean vigentes en el tiempo.
Asimismo reconoció que el Parlamento todavía debate leyes que deberían ya estar sancionadas.
"Creo que la salida sería poder coordinar las acciones de manera más eficiente y eso lo intentaremos hacer en las próximas semanas y en los próximos meses, para que esta ciudadanía, que se merece una vida más digna, puedan obtener los resultados que desea", agregó.
Sobre la Reforma Agraria, el jefe de Estado de Paraguay, indicó que las múltiples movilizaciones de organizaciones sociales realizadas en el país suramericano, cobran sentido partiendo del hecho que la Reforma va más allá de una simple repartición de tierras.
"Definitivamente la reforma agraria no la consideramos simplemente como una repartija de tierras, tal como se ha hecho históricamente en el país. Por eso hay unas 20 organizaciones estatales hoy en coordinación, la cuestión técnica, la cuestión crediticia, de acompañamiento, de salud, de educación, de infraestructura, la que tiene que ir acompañando todo el proceso para que la producción agrícola pueda tener resultados positivos especialmente cerrándose el círculo de la comercialización y que esto le pueda permitir una vida mucho más digna al hombre del campo".
Más temprano, el obispo paraguayo, Mario Melanio Medina, conocido defensor de los Derechos Humanos, exhortó al presidente Lugo a "dejar de anotar para empezar a actuar", al respecto el mandatario respondió que "tenemos que gestionar conjuntamente, el Ejecutivo está actuando, pero los otros estamentos de la sociedad tienen que ir acompañando eficazmente todo el proceso".
"Tenemos que seguir anotando los hechos, los acontecimientos y sobre todo los grandes desafíos y marcar el rumbo como lo estamos marcando ahora, un rumbo hacia una democracia por más calidad, donde las instituciones sean más eficientes, en donde las personas también puedan apoyar por un proyecto común", puntualizó.
Fuente: Alternativa Bolivariana.
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