jueves, 10 de febrero de 2011

Una “aberración política”, intención de Emilio de cerrar las fronteras del estado


"Está tratando a michoacanos y zacatecanos como inferiores; como si Jalisco fuera el primer mundo”

ANÍBAL VIVAR GALVÁN

El proyecto que busca crear cuarteles militares en las fronteras de Jalisco con el objetivo de proteger el estado es una decisión políticamente equivocada, que discrimina a los habitantes de los estados vecinos y que, además, contrapone con lo establecido en la Constitución, aseguró el jefe el Departamento de Disciplinas Afines al Derecho de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Julio Noé Aguilar Betancourt, quien consideró que con esto el titular del Ejecutivo en el estado, Emilio González Márquez, realiza atribuciones que le competen sólo al presidente de la república.

“Eso es rotundamente una aberración política. No somos una nación, somos un estado que está confederado a una nación, en todo caso es el presidente de la república, como comandante en jefe de las fuerzas armadas, el que pudiera hacer eso y no un gobernador. Tampoco es factible que un gobernador dé esta propuesta porque es como colocarse por encima de los gobernadores de Michoacán y Zacatecas”, dijo el académico quien recordó que si bien todos los estados cuentan con instalaciones militares los efectivos continúan bajo el mando del titular del Ejecutivo nacional.

“Esa es una práctica discriminatoria (ya que) está tratando a los michoacanos y a los zacatecanos como inferiores como tercermundistas y como si Jalisco fuera un país de primer mundo, eso es aberrante tolmente”, dijo y mencionó que si el titular del Ejecutivo en el estado “no puede garantizar, en el ánimo de su competencia y de sus recursos, la seguridad (en Jalisco) pues que lo declare pero que no ponga en riesgo el pacto nacional por sacar adelante una relación pública, porque la organización de unos juegos deportivos es pura propaganda, no es de interés estratégico”.

En referencia a los Juegos Panamericanos dijo que este tipo de actividades fomentan la inversión en algunos cuantos sectores, como el de la publicidad, sin contribuir de forma significativa al desarrollo de los jóvenes en la entidad.

Mencionó además que los estados cuentan con una soberanía en su interior, sin embargo, la confederación que conforman es lo que da forma a la nación como tal, aspecto que no puede ser rebasado por alguno de los gobiernos. Agregó que ante las fuerzas armadas no existe distinción de los habitantes por el estado al que pertenecen pues “todos somos mexicanos”.

Aguilar Betancour recordó que desde el año 1995 las fuerzas armadas pueden intervenir en aspectos de seguridad en las distintas entidades del país toda vez que la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió una jurisprudencia en la que se señala que la milicia, al formar parte del sistema nacional de seguridad pública, pueden participar en acciones de combate a la delincuencia, sin embargo, siempre bajo las órdenes del Ejecutivo nacional.

El académico mencionó que los protocolos de intervención con los que cuenta la presidencia de la república, acorde a las leyes orgánicas del Ejecutivo y de la Secretaría de la Defensa Nacional, marcan que el Estado Mayor Presidencial será el encargado de encabezar y organizar el operativo para blindar la seguridad mediante el uso de las fuerzas armadas para situaciones especiales, como lo son los Juegos Panamericanos, por lo que el gobernador de Jalisco debe acudir primero a esta instancia antes que pensar en la colocación de los cuarteles militares en los límites del estado.

Fuente: La Jornada de Jalisco

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