El nuevo Informe Especial sobre secuestro de migrantes en México, que ayer dio a conocer la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), los secuestros en contra de los centroamericanos no han disminuido, sino por el contrario, se han incrementado y del total de víctimas, que es de 11 mil 333, principalmente ocurrieron en Veracruz, seguido por Tabasco, Tamaulipas, San Luis Potosí, durante los meses de abril a septiembre de 2010.
En 108 páginas que integran el informe de la CNDH, se señala que en un periodo de seis meses, de abril a septiembre de 2010, se documentó un total de 214 eventos de secuestro, de los cuales, según el testimonio de las víctimas y testigos de hechos, resultaron 11 mil 333 víctimas.
Esta cifra refleja que no han sido suficientes los esfuerzos gubernamentales por disminuir los índices del secuestro en perjuicio de la población migrante, ya que sólo los gobiernos de Oaxaca, Chiapas y Nuevo León han implementado medidas de protección a quienes atraviesan por el país rumbo a los Estados Unidos.
Los estados en que se presentó el mayor número de eventos de secuestro, de acuerdo con los testimonios ofrecidos por víctimas y testigos, son Veracruz, seguido de los estados de Tabasco, Tamaulipas, San Luis Potosí y Chiapas, señala el informe.
De los 178 testimonios recabados por la CNDH, en 8.9 por ciento de los casos, testigos o víctimas refieren la colusión de alguna autoridad en la comisión del delito de secuestro. Entre las más frecuentemente aludidas se encuentran distintas corporaciones de policía municipal, personal del Instituto Nacional de Migración (INM) e instituciones de seguridad pública estatal, así como la Policía Federal (PF).
El documento señala que los puntos de riesgo para los migrantes que atraviesan Veracruz son “vías del tren en los puntos de Las Choapas, Agua Dulce, Medias Aguas, Jesús Carranza, Amalgres, Sayula de Alemán, Acayucan, Mundo Nuevo, Coatzacoalcos, Cosamaloapan, Tierra Blanca, Córdoba, Loma Bonita, Orizaba y Río Blanco, certificadas por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Asimismo, registra que de enero de 2009 a abril de 2010 se realizaron 17 operativos para liberar a migrantes víctimas de secuestro privados de su libertad, 16 por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en Baja California, Chiapas, Tamaulipas, Tabasco y Veracruz, con los que se puso en libertad a 486 víctimas, y uno por parte de la PF, en Reynosa, en el que se rescató a 29 migrantes.
Un dato alarmante es que a principios de 2010, la CNDH realizó un sondeo basado en la información con la que cuentan sus oficinas regionales, que arrojó, tan sólo durante el mes de agosto de 2009, un total de mil 211 migrantes víctimas de secuestro.
La situación actual del secuestro de migrantes en México refleja que hacen falta acciones de coordinación entre las instituciones encargadas de prevenir y combatir el delito a nivel federal, estatal y municipal, así como mecanismos y acciones suficientes para garantizar al migrante sus derechos a la seguridad pública, libertad, legalidad, seguridad jurídica, integridad, seguridad personal y trato digno.
De igual manera, del cruce de información entre lo reportado al Centro Nacional de Información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, por las entidades federativas, en los años 2009 y 2010, y lo informado a la CNDH, se advierten algunas inconsistencias en lo que respecta a la información relacionada con el estado de Veracruz, toda vez que en los informes que brindó al Sistema Nacional de Seguridad Pública, la entidad federativa señaló que en los años 2009 y 2010 no se recibieron denuncias de secuestro.
Sin embargo, en el informe rendido a la CNDH respecto de los casos de secuestro de migrantes denunciados en el periodo de junio de 2009 a junio de 2010, la Procuraduría General de Justicia de Veracruz (PGJ) precisó que se iniciaron cinco averiguaciones previas por esos hechos, de las cuales tres fueron consignadas y dos se encuentran en trámite.
Por lo que solicita a las procuradurías de los estados que concerte e implemente mecanismos de intercambio de información con la Procuraduría General de la República (PGR) y dé seguimiento a hechos y eventos de secuestro en perjuicio de la población migrante.
Los indocumentados secuestrados denunciaron los grupos de la delincuencia organizada que operan el secuestro de migrantes cuentan entre sus filas con migrantes centroamericanos. Asimismo, se destaca que algunos albergues de atención a migrantes han sufrido ataques de parte de los secuestradores que ingresan a éstos para perseguir a sobrevivientes o, en su caso, elegir nuevas víctimas.
A pesar que la manera de capturar a los migrantes se ha diversificado, la extorsión se sigue realizando de la misma manera: los torturan hasta obtener el número telefónico de sus familiares en su país de origen o en EU e, iniciada la comunicación con los familiares, les indican bajo qué condiciones debe hacerse la transacción para liberarlos. Igualmente, los migrantes señalan la complicidad de las policías municipales y estatal con los secuestradores.
Fuente: La Jornada de Veracruz
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