lunes, 1 de febrero de 2010

La adopción para parejas gay equivale a legalizar homicidios

Postura de la Arquidiócesis de Guadalajara en su más reciente edición de Semanario


¿Para qué están las leyes, para tutelar el orden o ponerse al servicio de lo que sucede en la calle?, dice

MAURICIO FERRER

Legalizar la adopción para parejas homosexuales equivale a hacer legal los homicidios o el narcotráfico, según la postura de la Arquidiócesis de Guadalajara en su más reciente edición de Semanario, su órgano de difusión dominical.

“Es verdad que algunos pequeños están creciendo bajo el techo de parejas homosexuales. Y, en base a que el hecho está teniendo lugar entre nosotros, algunos argumentan que la legislación debe ofrecer un marco legal a lo que está ocurriendo (…) En tal sentido, entonces, deberíamos legalizar todos los asesinatos, el narcotráfico o cualquier otra actividad que ya se hizo común para muchos”, argumenta la publicación de la Iglesia católica de Jalisco que preside el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, en la editorial de este domingo que lleva por título Niños juguete (toy children).

Y continúa: “¿para qué están las leyes, para tutelar el orden o para ponerse al servicio de lo que sucede en la calle? El caso es que este principio suele ser mantenido según conveniencia, ya que a nadie se le ocurre decir que la Ley deba despenalizar el robo, por ejemplo, basándose en el hecho incuestionable de la existencia de los carteristas y asaltantes”.

En el texto, la Arquidiócesis de Guadalajara asegura que los menores “arrastran graves complejos al ser adoptados por parejas homosexuales” en contraste con aquellos que tienen “padre y madre”.

“Y no es que los homosexuales, por naturaleza, sean malos o menos buenos que los heterosexuales, o más malos que otros; no. Sólo aplica el sentido común: se necesita lo femenino y lo masculino delante del niño”, afirma.

La Iglesia tapatía, dice en su publicación que al dictarse cualquier legislación relacionada con los menores debe protegerse prioritariamente a los mismos como mero objetivo ya que no se tratan de “juguetes o artículos de uso”.

“Al margen de falacias, lo que debemos denunciar es que se utiliza a los menores como instrumento de presión ideológica. No se puede aceptar que los más inocentes se conviertan en herramienta reivindicativa en pro de emancipaciones que no pueden fungir bajo la tutela femenina y masculina bien definida”, según la Arquidiócesis local.

Fuente: La Jornada de Jalisco
Difusión: AMLO TV

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