sábado, 6 de septiembre de 2008

EVO DENUNCIA GOLPE CIVIL Y LLAMA A LA UNIDAD DEL PUEBLO Y FF.AA.


El presidente boliviano, Evo Morales, denunció este jueves que está en marcha en su país un "golpe civil", cuyo primer capítulo es la toma de instituciones públicas por parte de grupos de choque financiados por las prefecturas que controla la oposición de ultraderecha.

Ante esta situación, convocó a la "unidad del pueblo y a las Fuerzas Armadas para defender la democracia boliviana".

Morales, quien tenía previsto llegar al país andino en horas de la noche de este jueves, luego de visitar a Libia e Irán, en contacto telefónico con la Agencia Boliviana de Información (ABI) desde el avión que lo transportaba de regreso a su país indicó que la derecha puso en marcha un nuevo plan para derrocar a su gobierno.

El martes, una turba de "cívicos" y miembros de la denominada Unión Juvenil Benianista intentó tomar las instalaciones de Impuestos Internos en Trinidad (Beni), armada de palos y armas de fuego, según denunció el ministro de la Presidencia , Juan Ramón Quintana.

Un día después, en la localidad de Cobija (Pando), campesinos y sin tierra, financiados por el prefecto Leopoldo Fernández, tomaron por la fuerza las oficinas del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) y de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC).

Semejantes hechos se registraron en el departamento de Santa Cruz, mientras que han recibido amenazas de muertes varios líderes sindicales e indígenas.

El jefe de Estado boliviano señaló que los intentos golpistas, "amparados sólo en la ilegalidad y que se atribuyen la representación del pueblo", reeditan los sucesos de la asonada del 17 de julio de 1980, que lideró el ex dictador Luís García Meza.

Criticó a la oposicón xenófoba que se agrupa en los "comités cívicos" y en el autodenominado Consejo Nacional Democrático (Conalde), donde se encuentran algunos de los más furibundos opositores al gobierno socialista.

"Las acciones del llamado Consejo Nacional de la Derecha, Conalde, en Cobija y Trinidad, coinciden con las asumidas durante el levantamiento armado contra la democracia el 17 de julio de 1980. Ahora intenta iniciar un golpe civil tomando instituciones", denunció Evo Morales.

Añadió que los sectores conservadores del país, encabezados por los prefectos de Santa Cruz, Pando, Beni y Tarija, "ahora arremeten contra las Fuerzas Armadas y la Policía" porque ambas instituciones se constituyen en firmes baluartes del estado de derecho.

Se refería a que, en represalia a la actuación de la Policía Militar contra los disturbios y vandalismo en Trinidad, el presidente del Comité Cívico del Beni, Alberto Melgar, dio un plazo de 48 horas al comandante de la Sexta División de Ejército, coronel Fernando Rocabado, para que abandone "territorio beniano".

Esa amenaza volvió a ser reiterada este jueves, pero recibió una firma respuesta del jefe militar, quien aseguró que cumplirá su deber constitucional de velar por la seguridad de la población beniana.

La ejecución del plan continuó este jueves también en Cobija donde esos mismos grupos de choque tomaron primero la Superintendencia Forestal y luego la oficina de la Representación Presidencial a cargo de Nancy Texeira.

Gobierno debe preservar el orden

El presidente boliviano advirtió que es obligación del gobierno constitucional preservar el estado de derecho y utilizar todos los instrumentos que le otorga la Carta Magna para garantizar su vigencia.

Indicó que los políticos neoliberales olvidan que fueron ellos quienes en el pasado utilizaron a la entidad armada para la preservación de intereses particulares.

Acciones violentas, cargadas de odio racial, han tenido lugar en los últimos días, instigadas por comités cívicos y prefecturas de la autodenominada "media luna".

Esos grupos exigen la devolución del 30 por ciento de los recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), que antiguamente el gobierno entregaba a las regiones y que ahora se destina al pago de una ayuda social a la tercera edad denominada Renta Dignidad.

También defienden una "autonomía" que ha sido denunciada por el Gobierno como separatismo.
El presidente Evo Morales aseguró que su gobierno "no tolerará esos hechos que lastiman la democracia" y enfatizó que, por sobre todas las cosas, la defenderá.

Fuente: Alternativa Bolivariana.

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