Durante la madrugada del sábado 15 elementos del Estado Mayor Presidencial instalaron retenes en todas las vías de acceso al Zócalo capitalino. Eso motivó que un grupo de valerosos miembros de la resistencia civil pacífica haya intentado tomar la esquina de 16 de septiembre y 5 de febrero, lo que ocasionó el despliegue de docenas de granaderos de la Policía Federal Preventiva que intentaron replegarlos con sus amenazantes toletes. Más tarde e inexplicablemente salvo como un burdo acto de provocación, granaderos de la PFP entraron marchando ruidosamente hasta rodear las grúas que izan los altoparlantes del templete del Gobierno del DF:
Toda la noche no cesaron de arribar decenas y decenas de camiones del ejército transportando desde tropa uniformada y armada hasta los dientes, hasta varios miles de soldados vestidos de civil, en dos modalidades pero siempre con el mismo corte de cabello y usando zapatos color negro: unos de estilo casual y otros formales:
Al amanecer, los miles de militares vestidos de civil que habían estado agrupados frente al edificio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, fueron dispuestos contra la valla que limita el avance de la resistencia civil pacífica:
Encerrados en su corral, los militares de civil servirán de extras para las tomas de público, iluminadas por los potentes reflectores de la azotea de Palacio Nacional:
Durante la mañana siguieron llegando más y más elementos del ejército, mientras que infiltrados y patrullas de granaderos de la PFP recorren la plancha del Zócalo:
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