Quito, 23 de agosto de 2007
La oposición a la actividad de la transnacional minera Ascendant Copper en Intag, ha significado para los líderes de esta zona una verdadera persecución caracterizada por una serie de actos intimidatorios cada vez más violentos.
Ascendant Copper maneja el proyecto Junín, compuesto por las concesiones mineras Golden 1, Golden 2 y Magdalena, en Intag. La presencia de Ascendant Copper no es grata para la mayoría de la población por las prácticas de la empresa para establecerse en la zona y dar paso a sus actividades de exploración de cobre. Intag está ubicada en la cordillera del Toisán, zona de ríos y abundante biodiversidad.
En un principio el clientelismo, la creación de organizaciones paralelas a las de la comunidad, convenios firmados con ciertos líderes por los cuales se ofrecía la entrega de dinero a cambio de facilitar el ingreso del personal de la empresa, fueron las estrategias de Ascendant que provocó la división interna en las comunidades.
A medida que la oposición a la minería fue creciendo, aparecieron las amenazas de muerte de empleados y allegados de Ascendant contra líderes comunitarios de Intag (existen al menos 5 denuncias en
La radio y el periódico Intag que han servido como mecanismos para articular la organización y la participación de las comunidades frente al conflicto propiciado por la minera, también han sufrido persecución. El periódico Intag enfrentó desde el 2004 un proceso penal por injurias calumniosas, el caso fue archivado porque se demostró que la denuncia era infundada. Mientras se ejecutaba un planificado ingreso a Junín en diciembre de 2006, de hombres armados de la empresa Falericorp, que había firmado un convenio con Ascendant Copper, Radio Intag sufrió un atentado, fue destruida la cerca que protege las instalaciones de la radio comunitaria, y fueron rotos aproximadamente
Los casos de los líderes Carlos Zorrilla, Polibio Pérez y el último asalto y robo contra José Cueva y Héctor Flores hacen temer por la seguridad y la integridad de la población de Intag que lleva una legítima oposición a la actividad minera que tantos atropellos ha provocado.
Carlos Zorrilla, miembro fundador deDECOIN (Defensa y Conservación Ecológica de Intag), organización poblacional que apoya a las comunidades de Intag en su proceso de resistencia frente a las actividades mineras de
Durante el año 2006 en julio Léslie Brooke Chaplin, infiltrada que repartió volantes a favor de la minería y en contra de Decoin en una movilización de pobladores de Intag en Quito, pone una acusación contra Carlos Zorrilla por supuesto robo y lesiones. En octubre se realiza un allanamiento a la vivienda de Carlos Zorrilla, los policías llegaron en autos de la empresa Ascendant Copper, en este operativo los policías hacen aparecer en la vivienda un arma y un paquete que contenía supuestamente droga y esto es llevado como evidencia. Este día su familia conoce que existen estos dos procesos contra el líder y lo que es más una orden de prisión. Carlos Zorrilla nunca fue notificado de los procesos, en el que se intentó involucrar a 6 líderes más. En noviembre se abre una instrucción fiscal contra Carlos Zorrila por tenencia ilegal de arma, el proceso fue llevado a Imbabura donde, en marzo de 2007, el Fiscal se abstuvo de acusar a Zorrilla. La orden de prisión fue revocada por no existir elementos suficientes en su contra.
Polibio Pérez, la empresa ha puesto varios juicios en su contra y ha sufrido constantes amenazas. La última sucedió el martes 31 de julio de 2007, en
José Cueva, joven líder ecologista de Intag que promueve actividades productivas como alternativas a la minería fue objeto de un delito poco común en Cotacachi, el 13 de agosto de 2007. Mientras se encontraba en la casa de unos amigos también ecologistas, a las 21:00, 5 sujetos fuertemente armados entraron por la fuerza a la vivienda y luego de agredirlos físicamente los ataron de pies y manos y se llevaron todas sus pertenencias, incluyendo computadores portátiles y el vehículo de José Cueva,con ellos se encontraba su pequeño hijo. A las 03:00 lograron desatarse y acudieron a
Es urgente que el Estado adopte todas las medidas necesarias para garantizar la paz, la seguridad en todos sus ámbitos y el respeto fiel a los derechos humanos en la población de Intag y otras comunidades que en todo el país se encuentran defendiendo su derecho a vivir libres de la minería. Las empresas mineras en el Ecuador han desatado graves episodios de violencia en comunidades de Imbabura, Morona Santiago y Zamora Chinchipe que, a través de mecanismos de división de los pobladores, grupos armados o hasta miembros de
Paulina Ponce
Comisión Ecuménica de Derechos Humanos
CEDHU
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