Se procesó a Vázquez Durán para encubrir irregularidades
Fuente: La Jornada de Guerrero
ROBERTO RAMIREZ BRAVO
El representante para las Américas de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), Benoit Hervieu, calificó el proceso que se siguió por el asesinato del periodista Amado Ramírez Dillanes como “un caso tramposo”, debido a que al haber presentado un responsable y haberle dictado sentencia, el gobierno asume que ha sido resuelto, aunque esté lleno de irregularidades, y con ello inhabilita la crítica de organismos internacionales.
Dijo también que este crimen es una derrota para la libertad de expresión, no solamente por la muerte en sí, sino por la desaparición de su programa radial Al tanto y el desinterés de Televisa por demandar el esclarecimiento.
Benoit Hervieu, quien tiene su oficina en París, Francia, estuvo en Guerrero la semana pasada, acompañado por la corresponsal de la organización en México, Balbina Flores, y aunque agendó una entrevista con el procurador de Justicia Eduardo Murueta Urrutia con al menos un mes de anticipación, el funcionario no lo recibió.
En entrevista en Acapulco, narró que había acordado el encuentro con Murueta Urrutia, pero al presentarse en sus oficinas en Chilpancingo “hubo una confusión en la agenda” y no fue recibido, después de una larga espera, pero sí pudo platicar con integrantes de la Comisión De Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum).
Antes, dijo, visitó Michoacán y el Distrito Federal, para conocer de cerca los casos de represión a reporteros.
En el caso específico de Amado Ramírez, relató que tras enterarse de los detalles, hay una percepción de que hubo una confesión forzada del procesado por este crimen, Genaro Vázquez Durán, y para obtenerla lo torturaron, lo que fue documentado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Sin embargo, dijo que una estrategia de los gobiernos en situaciones que son muy notorias es detener a alguien y procesarlo para que no se diga que no hay seguimiento al crimen, y así amarrarle las manos a las organizaciones que demandan justicia.
Parte de esta misma estrategia es la creación de una fiscalía especial para investigar las agresiones a los periodistas, porque da la idea en el plano internacional de que en México se hace algo para protegerlos, sin embargo, esta oficina no tiene ningún sentido cuando no investiga dichas agresiones, como ocurrió con Amado Ramírez, en cuyo caso no se levantó ninguna indagatoria federal y se mantuvo siempre en el plano local.
Benoit Hervieu aseguró que la organización hará un pronunciamiento con todas las irregularidades que encontró en México, donde pese a la apariencia de que hay acciones en favor de los periodistas, al menos 50 comunicadores han muerto en los últimos años, situación que se ha agravado tras la ofensiva gubernamental contra la delincuencia organizada.
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