Olvido presidencial

Fuente: La Jornada de Oriente (Tlaxcala)

Coral Avila Casco

En el tercer informe del presidente Felipe Calderón resulta interesante encontrar la siguiente afirmación: Se logró que el proceso de armonización de sistemas y leyes contra la violencia a nivel estatal comprendiera a casi la totalidad de las entidades del país, para esto se han creado 32 leyes estatales para prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres y 19 sistemas estatales en la materia.

Y es interesante porque el presidente olvidó mencionar que si bien esto es un logro, es un logro mediocre porque sólo seis entidades federativas cuentan con el reglamento correspondiente y sin él la ley de nada sirve por no tener aplicabilidad. Nuestros gobernantes y nuestros diputados ni idea tienen de la preocupación internacional porque el proceso de armonización legislativa en materia de derechos humanos de las mujeres en México está perdido en el laberinto de la indiferencia y la demagogia.

Las mujeres seguimos sin ser consideradas como sujetas de derecho y no somos centro para la elaboración de políticas públicas. Ejemplos sobran: no se ha tipificado el feminicidio como delito en los códigos penales del país, no se realizan tareas de diseño y aplicación de protocolos de atención para las policías, ministerios públicos y jueces, que incorporen la perspectiva de género y mucho menos se brinda la atención necesaria a la reparación del daño de las víctimas.

Además, recientemente fuimos burlados y engañados cuando ocho diputadas federales electas, durante la primera sesión de la LIXI Legislatura de la Cámara de Diputados solicitaron licencia para ceder sus lugares a varones.

Por si fuera poco, el Ejecutivo federal prevé un recorte presupuestal para el próximo ejercicio fiscal por alrededor de mil 500 millones de pesos a los programas de equidad, salud y trabajo diseñados para las mujeres.

Las cinco diputadas locales tienen una asignatura pendiente para con la mujeres que vivimos en este estado, sería conveniente que ante este olvido presidencial se dieran a la tarea de trabajar.