Discurso del Ministro Cubano del Exterior Felipe Pérez Roque en
Ministros y Jefes de Delegaciones de los países Miembros y Observadores del Movimiento de Países No Alineados.
Distinguidos delegados e invitados:
A nombre de
Esta Conferencia brinda una excelente oportunidad para el intercambio de experiencias e ideas, el diseño de iniciativas y proyectos, y el debate y la definición de estrategias y acciones concretas que permitan al Movimiento de Países No Alineados enfrentar con éxito la peligrosa y desigual situación que en el orden de la información y las comunicaciones sufren hoy nuestros países.
El injusto y antidemocrático orden internacional a que se nos pretende someter es responsable del abismo que separa al Norte del Sur en cuanto a la producción, acceso y flujo de la información. Sustenta, además, la violación del derecho de nuestros pueblos a recibir información veraz y objetiva, requisito imprescindible al ejercicio de la libertad y la libre determinación.
El control monopólico de la información y las comunicaciones constituye un componente estratégico en los planes de dominación imperial. Para los Países No Alineados, la reivindicación del acceso, la producción autóctona y un flujo de la información verdaderamente democrático, responsable y objetivo, constituye un objetivo irrenunciable.
Resulta imperiosa la lucha por la promoción de una imagen objetiva y justa de la realidad de nuestros países. Debemos exigir que se transmita la verdad. Plantear nuestra alternativa. Defender nuestros derechos. El Nuevo Orden Mundial de
Somos bombardeados continuamente por falsas alegaciones fabricadas contra países miembros del Movimiento. Nuestras realizaciones son muchas veces tergiversadas o simplemente silenciadas. La mentira se vuelve práctica cotidiana. Se intenta interpretar y escribir la historia desde la óptica de los poderosos. Se pretende justificar la discriminación y la xenofobia. Se crean reflejos condicionados a través de los medios. Se convierte a las víctimas en victimarios. Se colocan etiquetas y se crean estereotipos a conveniencia. Se idiotiza y se miente.
La manipulación política de la información y la complicidad de los medios de comunicación alcanzan niveles extremos. Se articulan campañas con fondos multimillonarios y los más sofisticados medios. Se trata del terrorismo mediático, el arma más efectiva del Siglo XXI en manos de los poderosos.
Cuba conoce bien sus efectos. Por casi cinco décadas, ha debido también enfrentar la agresión radioelectrónica en contravención de las normas del Derecho Internacional . Desde los Estados Unidos de América se emiten semanalmente hacia Cuba casi 2 mil horas por 30 frecuencias diferentes, utilizando 19 emisoras de radio y televisión. En estas transmisiones, que crean interferencias perjudiciales a nuestros servicios nacionales, se llama a la violencia y al asesinato, se falsifican y tergiversan los hechos, se promueve la destrucción del orden constitucional legítimamente establecido y refrendado por el pueblo cubano.
Mientras, Cuba es reconocida por
Por otra parte, ante una crisis energética y alimentaria de alcance global, la idea del consumismo como sinónimo de bienestar continúa siendo irresponsablemente alentada. Los noticieros, espacios publicitarios y prácticamente toda la llamada industria del entretenimiento, imponen un modelo único de sociedad, depredador del medio ambiente y empobrecedor de las mayorías, a la vez que demonizan cualquier propuesta alternativa al orden vigente.
¿Cómo alcanzar el objetivo de una sociedad informada, participativa e incluyente, si en los países subdesarrollados casi 800 millones de personas siguen siendo analfabetas y 80 millones de niños no asisten a la escuela primaria?
No existen tecnologías milagrosas que hagan posible la erradicación de la pobreza y el subdesarrollo. Se necesita cambiar el orden mundial. Se necesita la voluntad política de aquellos que, además de ser responsables y beneficiarios de esta situación injusta e insostenible, cuentan con los recursos, hoy dilapidados en armas, lujos y extravagancias.
El orden económico internacional vigente, cuyo nefasto impacto se ha visto recrudecido por el efecto de la globalización neoliberal, hace imposible la superación de la llamada brecha digital, que crece y profundiza la desigualdad y la polarización del bienestar y la pobreza.
Internet ofrece la posibilidad de colocar a bajo costo la información que oculta la dominación mediática. Pero no nos engañemos, Internet está también invadida por las grandes empresas.
La abismal diferencia en el acceso a Internet entre las naciones del Sur y del Norte industrializado nos vuelve a colocar en desventaja. Hoy, más de la mitad de los usuarios de Internet en el mundo son de Norteamérica y Europa, pese a que la población de estas regiones no sobrepasa un sexto de la población mundial. Son ellos también los propietarios de las tres cuartas partes de la infraestructura de Internet. La democratización de la gobernabilidad de Internet se mantiene bloqueada. Los contenidos que circulan en el ciberespacio son elaborados abrumadoramente en los países del Norte y el 95% de ellos en sólo 10 lenguas. Resulta imperativo poner
En adición a todo lo anterior, hay un empleo creciente por parte de las grandes potencias de las tecnologías de la información y las comunicaciones para el espionaje contra nuestros países y para la guerra. Grandes redes de inteligencia electrónica, de las que
Por si esto fuera poco, el Coronel Charles W. Williamson escribe en
Excelencias:
El Movimiento de Países No Alineados debe trabajar mucho más en el ámbito de la información, en cumplimiento del mandato que nos fuera planteado por nuestros Jefes de Estado y de Gobierno en
Tanto para retomar la lucha por un nuevo orden internacional de la información y las comunicaciones, como para generar iniciativas que propongan visiones alternativas a la que se nos impone, resulta imprescindible actuar unidos y concertar acciones.
Aprovecho para reconocer el esfuerzo desplegado por Malasia en la revitalización de
Urge la articulación de proyectos multinacionales a nivel regional e internacional. La experiencia de Telesur, nacida a partir de la iniciativa del Presidente Chávez e impulsada por varios gobiernos latinoamericanos, demuestra que es posible construir una alternativa. La televisión Al Jazeera, con varias de sus corresponsalías bombardeadas, es otro ejemplo de información independiente. Iniciativas como el Fondo de Solidaridad Digital, para financiar la reducción de la brecha digital, deben ser estimuladas. Unamos fuerzas para defender nuestro derecho a la verdad, a un orden internacional justo y equitativo y a la solidaridad internacional.
Trabajemos en esta VII Conferencia de Ministros de Información del Movimiento de Países No Alineados con la convicción de que, aunque el reto es grande, nuestra determinación es mayor.
Sí se puede luchar y lucharemos.
Muchas gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario