María de la Cruz Canales Gutiérrez trabaja en Pemex desde hace dos años y se encontraba en la zona donde ocurrió el estallido el pasado jueves. Su familia no descarta que se encuentre con vida.
A cinco días de la explosión en el edificio B2 del complejo administrativo de Petróleos Mexicanos (Pemex), una persona continúa desaparecida. Se trata de María de la Cruz Canales Gutiérrez, de 48 años de edad, y quien laboraba en el área administrativa de la paraestatal desde hace dos años.
Canales Gutiérrez es la única persona cuyo paradero sigue sin conocerse, de las cuatro que se reportaron tras la explosión del pasado jueves 31. Hasta ahora sólo han sido encontradas algunas de sus pertenencias, entre ellas su teléfono celular, una prenda de vestir y una credencial.
Canales Gutiérrez se encontraba en el edificio donde ocurrió la explosión, despidiéndose de su esposo, quien trabaja en el área contra incendios de la empresa.
Sus familiares han colocado carteles con fotografías y señas particulares en las principales entradas del centro administrativo de Pemex.
En el Servicio Médico Forense permanece el cuerpo de una mujer, cuya identidad aún se desconoce, por lo que durante el fin de semana uno de los tres hijos de la mujer desaparecida, Alan Carmona, se sometió a pruebas de ADN a fin de determinar si se trata de su madre.
Sin embargo, Marcelo Carmona, cuñado de la empleada desaparecida, refirió que la mujer no identificada “tiene una perforación en los oídos y mi cuñada tenía cuatro”, de acuerdo con CNN México.
El coordinador general de Socorro de la Cruz Roja, Isaac Oxenhaut, dijo que en caso de que los exámenes determinen que no se trata de Canales Gutiérrez se reanudaría la búsqueda en los escombros del inmueble.
Ls familiares de Canales Gutiérrez no descartan que la mujer esté viva y haya sido una de las primeras personas rescatadas el día de la explosión. Por ahora se mantienen a la espera de los resultados del ADN.
(Con información de CNN, El Universal y La Jornada)
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